Poza de la Sal continúa la búsqueda de la ciudad romana de Flaviagusta

Un equipo de ocho profesionales, entre arqueológicos y restauradores, capitaneado por Esperanza Martín, trabajará durante tres semanas en el asentamiento de Cerro Milagro. Contará con la ayuda de cinco estudiantes voluntarios, pero dejan la puerta abierta a que vecinos y amantes de la arqueología puedan acercarse también a colaborar o a conocer de primera mano en qué consiste el proyecto arqueológico.

Martín ha recordado que, en la campaña del pasado año, obtuvieron resultados muy bueno. Se realizaron trabajos de teledetección, prospecciones con radar y drones y consiguieron imágenes muy claras de una urbanización romana, con sus calles, plazas y edificios. «Es espectacular», admite Martín, pues no es habitual que el georradar ofrezca resultados tan claros, y facilita el trabajo de excavación.

Así, para este 2021 se va a empezar a excavar tras pedir permiso al propietario de los terrenos, un agricultor del municipio, que «solo nos ha dado facilidades», asegura Martín. Actuarán en unos 100 metros cuadrados en el extremo norte del yacimiento, para abarcar «una estructura que se ve perfectamente en el radar« y analiza el potencial arqueológico del yacimiento, su cronología y naturaleza.

La arqueóloga admite que «no cabe duda de que es un asentamiento romano con una urbanización bastante compleja», en el que se ven calles, plazas y se adivinan ampliaciones de inmuebles. Sin embargo, toca hacer el trabajo de confirmación para comprobar que es lo que parece y, también, determinar cómo de agotado se encuentra tras las expoliaciones sufridas a lo largo de su historia.

«Hasta que no excavemos no sabremos la potencialidad del asentamiento», apunta Esperanza Martín, aunque está claro que el yacimiento tiene una larga vida por delante. Además, de manera paralela a la excavación, se ha instalado un laboratorio en Poza para analizar, estudiar, restaurar y catalogar todos los materiales que se vayan recuperando. También se realizan escaneados en 3D de las piezas más significativas, lo que permite una mejor investigación.

La campaña de investigación lleva por título 'En busca de Flaviagusta', un guiño a todo el trabajo que han hecho investigadores anteriores (algunos hace muchos siglos) y que fueron los que pusieron sobre la pista de la existencia de este importante yacimiento. Las primeras referencias son del siglo XVI, del embajador veneciano Andrea Navagero, que en su libro 'Viaje por España y Francia' hace referencia a unas ruinas, cerca de Poza, que los vecinos decían que eran la antigua ciudad Milagro.

Esperanza Marín recuerda que, junto al yacimiento que están estudiando ahora, se encuentra un castro perromano bien conservado, Cerro Milagro, que da nombre a todo el proyecto arqueológico. Engloba diferentes yacimentos, que han ido sufriendo espolios a lo largo de la historia, aunque también se han estudiado en diferentes momentos. Por ejemplo, en el siglo XIX el jesuita Fidel Fita lanzó la hipótesis de que en Poza se localizase la ciudad Flaviagusta que menciona el grieco Ptolomeo.

No hay pruebas que avalen este extremo, ni que en Cerro Milagro se asentara la antigua población autrigona de Salionca, recuerdan los investigadores, pero el proyecto impulsado servirá para clarificar el pasado de Poza y arrojar luz sobre uno de los yacimientos más importantes de la provincia. De ahí el interés mostrado por el Ayuntamiento, que se ha involucrado desde el primer momento, y también de la Diputación. Entre ambos, aportan 17.000 euros a la excavación de este año.

Por ese motivo, el proyecto está abierto a la participación de cuanto voluntario esté interesado, y a la visita de vecinos o amantes de la arqueología en general. Se realizarán visitas guiadas y paseos arqueológicos, preferentemente los sábados, y el 2 de octubre habrá una jornada de puertas abiertas. También se podrán acercar al laboratorio para conocer, in situ, el trabajo de investigación.