Poza de la Sal celebra su tradicional Danza del Escarrete para la prosperidad del nuevo hogar

Como cada año, los protagonistas fueron las parejas que habían contraído matrimonio durante los últimos doce meses, simbolizando los animales domésticos la prosperidad del nuevo hogar. En la década de los años 60-70 del siglo pasado, esta tradición desapareció por causa del éxodo rural que sufrió Poza de la Sal, pero la Cofradía de San Blas la rescató a finales de los 70.

Este año, cinco parejas de jóvenes pozanos participaron en la tradicional danza, vestidos con el traje típico de la villa salinera, y bailaron a la pata coja alrededor de gallinas, gallos y conejos, portando en la mano derecha una espada, y con la mano izquierda en la cadera. Actualmente, la participación está abierta a toda pareja joven o simplemente que sepa el baile, ya que la despoblación ha provocado que el número de parejas nupciales en la zona fuese más reducido que en años previos.