La mortalidad creció un 22% en el primer semestre de 2020, impulsada por la covid-19

El informe sobre Movimiento Natural de la Problación recoge ese aumento de la mortalidad, especialmente destacado en los meses de marzo y abril, los más duros de la primera ola de la pandemia. Durante el primer semestre, en Burgos se contabilizaron 2.456 muertes, de las cuales, 1.246 corresponden a hombres y 1.210 a mujeres. Son 443 más que durante el mismo periodo de 2019, lo que hace que solo en seis meses se registrasen el 63% de las muertes contabilizadas en todo el 2019 en Burgos.

Y todavía faltan por conocer los datos relativos al segundo semestre, que el INE ofrecerá en los próximos meses, siguiendo su calendario habitual. Eso sí, tenemos un dato que de momento nos puede servir de referencia. En el portal de transparencia de la Junta de Castilla y León se recoge la mortalidad, por meses, calculada en función de las bajas de tarjetas sanitarias. Entre julio y diciembre, Sanidad ha registrado 2.314 fallecimientos en Burgos, y el cómputo anual se estima en 4.754 muertes, casi 1.000 más de las que se registraron en todo el 2019.

Los peores meses han sido marzo y abril, con 483 y 610 muertes, de acuerdo con los datos del INE. En 2019, durante esos mismos meses, se registraron 335 y 325 fallecimientos. También hubo un aumento en mayo y junio, con 341 y 313 muertes, mientras que enero y febrero (meses ajenos a la pandemia) registraron sendas reducciones, con 382 y 337 fallecimientos. Consultando los datos de la Junta, en el segundo semestre también se detecta un importante número de muertes en noviembre, con 510 casos y aumentos en todos los meses.

La covid-19, con sus efectos directos e indirectos, está detrás de este incremento en la mortalidad. La Junta estima que en Burgos han fallecido 1.163 personas a causa del coronavirus y el INE, con datos que van más allá de las simples bajas de tarjetas sanitarias, ya ha calculado que solo entre enero y mayo fallecieron por covid 303 personas. Y otras 150 se considerarían casos sospechosos, pues al principio muchas de las muertes nunca fueron diagnosticadas como contagios covid.

El informe sobre Movimiento Natural de la Problación del INE recoge también los nacimientos registrados en la provincia entre enero y mayo. Fueron 1.044, lo que supone un 11% menos que en el año anterior (entonces se alcanzó la cifra de 1.175). Además, el saldo vegetativo sigue siendo negativo, muy negativo por efecto de la pandemia, y es que murieron 1.412 personas más de las que nacieron.

La covid-19 también se ha dejado notar en los matrimonios, pues las restricciones y los confinamientos han impedido la celebración de la mayoría de las ceremonias. Así, en los seis primeros meses del año se registraron 139 matrimonios (8 fueron ceremonias católicas, 129 civiles y dos no consta el rito). En el primer semestre de 2019 se llegaron a celebrar casi 400 matrimonios, que fueron 1.067 en todo el año.