La vuelta al cole será verde en el CEIP Príncipe de España de Miranda

Después de que el pasado 30 de marzo el centro levantara buena parte del gris asfalto para, en un periodo de tiempo entonces indefinido, materializar parte del proyecto presentado a la Fundación Patrimonio Natural de la Junta de Castilla y León, el CEIP Príncipe de España ya cuenta con un espacio completamente renovado. Y todo, gracias a la empresa mirandesa Espacios Verdes, que por un importe de 529.000 euros, ganó la licitación de la Junta para renaturalizar los ocho patios seleccionados en la provincia de Burgos.

«Ahora el patio es más acogedor y también, suponemos que con el tiempo, cuando crezcan los árboles será un lugar en el que estar muy agradable dando clase o haciendo cualquier actividad a la sombra», celebraba Lydia Marcelo. Y no es para menos: ahora cuentan con una zona de recreo mucho más conectada con la naturaleza y adaptada a los efectos del calentamiento global. No en vano, el calor que retiene el asfalto puede ser muy perjudicial para la salud de los escolares en tiempos estivales.

Uno de los objetivos prioritarios de llevar la naturaleza al patio radica en convertir el asfalto el una potencial aula verde en la que impartir diversas materias educativas. «La escuela aboga por que los niños y niñas no permanezcan siempre en los mismos espacios y, según los expertos y psicólogos, el contacto con la naturaleza es muy beneficioso desde todos los puntos de vista: cognitivo, educativo y medioambiental», explicaban desde el centro cuando les fue asignado el proyecto.

Así las cosas, el pequeño anfiteatro de arena habilitado entre tanto verde hará las veces del espacio educativo exterior, aunque también es notorio el incremento de las zonas ajardinadas «con especies autóctonas que implican los diferentes bosques del entorno», tal y como explicaba el responsable de obras de Espacios Verdes, Jorge Núñez. Y a pesar de que, por una cuestión económica, las obras no contemplaron la ejecución de todo lo proyectado, desde el Príncipe se muestran satisfechas con este primer paso que permitirá trasladar la educación al exterior, complementando la iniciativa del huerto escolar en la que este centro también fue pionero en la ciudad.

No obstante, también han expresado «cierta preocupación» vinculada al mantenimiento de las nuevas zonas ajardinadas. «Tenemos que tener especial cuidado, sobre todo con los más pequeños, porque ya nos hemos dado cuenta de que es un nuevo juguete para ellos», explicaban. Esperan que, «a medida que se vayan acostumbrando y educando en el respeto a la zona, todo sea más fácil», pero para eso habrá que esperar, al menos, al transcurso del curso 2023/2024.

El aula verde no será la única novedad que incorpore el Príncipe entre sus instalaciones cara al próximo curso escolar. La implantación del curso destinado a escolares de un año en distintos centros públicos de la comunidad, incluido el Príncipe, ha propiciado el inicio de unas obras de adecuación de espacios que, no obstante, en el caso del centro mirandés ha derivado en la desaparición de su gimnasio.

Una pérdida que, de un modo u otro, afecta a todos los centros seleccionados para la inclusión de estos nuevos cursos escolares. Así, en Las Matillas también habrán de afrontar obras para reorganizar sus instalaciones en pro de la nueva aula; aunque uno de los centros más afectados será el CEIP La Charca que deberá mover varias clases a otros bloques. Sea como fuere, los resultados serán visibles a partir del próximo mes de septiembre, momento en el que 'la vuelta al cole' será más vistosa —o quizá más verde que gris— para los escolares del Príncipe.