Miranda refrendará en Astorga su compromiso con la red de Rutas Napoleónicas

El acuerdo suscrito entre el Ayuntamiento y Napoctep no genera obligaciones económicas pero sí contempla el compromiso de ambas partes de difundir actividades, recursos turísticos así como información histórica, gráfica y documental que ponga en valor el patrimonio histórico y turístico vinculado a la huella que dejó Napoleón Bonaparte en España.

Este espacio de cooperación, iniciado en 2019, se delimitaba territorialmente entre el centro de Portugal y la zona occidental de Castilla y León, si bien ha ampliado su delimitación para dar cabida a otras administraciones y entidades que tienen vinculación con la presencia napoleónica en España, como ocurre en el caso de Miranda.

Miranda era una de las villas españolas mejor situadas estratégicamente, como un baluarte defensivo que permitía controlar el Camino Real en ambas direcciones (Vitoria y Burgos), así como las vías de comunicación que transitaban paralelas al río Ebro tanto dirección a Logroño como hacia el Desfiladero de Sobrón. La defensa de la villa mirandesa se podía hacer con muy pocos efectivos, y su eficacia venía dada por la privilegiada situación de su castillo que, convenientemente reforzado y dotado de piezas de artillería, lo harían inexpugnable.

Otro dato que acredita la importancia de Miranda como Villa napoleónica queda constatada por el comportamiento de José Napoleón I que, tras la derrota de las tropas francesas en Bailén, abandonó Madrid llegando hasta nuestra ciudad donde instaló su cuartel general consciente de la seguridad que le brindaban las murallas y el castillo, contando además con una importante guarnición que velaba por la Villa y sus caminos de acceso.