El albergue de Miranda acoge una Escuela de Verano para pequeños artistas

Se trata de una de las actividades estivales del Instituto de la Juventud de Castilla y León, cuya directora, Estela López, ha asistido para presenciar en directo cómo los jóvenes músicos aprenden y practican. Allí, ha explicado que esta iniciativa forma parte no de los Cursos de Promoción Artística y Cultural que, a su vez, están integrados en la campaña de verano de Juventud. Un curso que ha tenido gran acogida y que se alargará hasta el 30 de julio.

El grueso de las actividades está diseñado para el estudio musical desde una perspectiva amena y amable, ya que los participantes disfrutan aprendiendo y, además, cuentan con distintas alternativas de ocio durante las horas libres. Las clases se estructuran en cinco tipos: música de cámara, para la práctica musical en grupo y la mejora de la capacidad de escucha y de sus habilidades sociales; orquesta, en la que se trabajan cuestiones fundamentales como las entradas de cada instrumento, los matices o los tiempos; técnicas escénicas, para entrenar la comunicación corporal a través de juegos y ejercicios físicos; clases de ritmo, lo cual es esencial en el ámbito musical; y, por último, clases de coro, para ahondar en técnicas vocales, pero también en el oído a través de la combinación con otras voces o el uso de la respiración.

Los profesionales integrantes de la Asociación Pan y Canela, que ejecuta el curso, han conformado una serie de talleres compuestos por disciplinas paralelas para que los resultados sean aún más completos y los jóvenes puedan conocer con mayor profundidad todas las dimensiones de la música. Es el caso de los talleres de Clown, improvisación, podcast, música y literatura, música y naturaleza, artes plásticas, fundamentos básicos de la composición o el laboratorio de ideas musicales.

Los objetivos principales se centran en el conocimiento de los diferentes estilos musicales, el trabajo en grupo o la integración de las diferentes artes escénicas, pero también en tomar conciencia de la importancia del cuerpo, la salud y el bienestar en la vida de un músico, cómo saber enfrentarse al público o transformar en una expresión natural la creación de ritmos y el reconocimiento de sonidos.

Los participantes cuentan también con una serie de actividades alternativas para su tiempo de ocio, tales como excursiones, baños en la piscina o actividades junto a los monitores como concursos musicales, karaokes, playbacks con atrezo y coreografía, 'air guitar' y una gran fiesta de despedida.