Aitana Hernando revalida su cargo como alcaldesa de Miranda

Así pues, el Partido Socialista mirandés regirá el Consistorio durante los próximos cuatro años, aunque en coalición con la alianza Izquierda Unida-Podemos. Y es que las nueve concejalías conseguidas por los de la rosa, si bien permitían un gobierno en solitario, no garantizaban la «estabilidad» de la que presume el nuevo equipo de Gobierno al que ahora hay que sumar cuatro ediles de la alianza izquierdista.

No obstante, la recién nacida coalición, que este sábado, 17 de junio, ha «prometido» el cargo, ya ha evidenciado la primera diferencia al recurrir a fórmulas distintas en su promesa. Mientras que los socialistas prometían, por su conciencia y honor, cumplir fielmente las obligaciones del cargo «con lealtad al Rey», la alianza a su izquierda abogaba por la «lealtad a la ciudad de Miranda», apostillando en el caso de Guillermo Ubieto —el número uno de Izquierda Unida— «lealtad a los principios republicanos».

La bancada representante de la derecha, con las siete concejalías del Partido Popular y la única de Vox representada por Miguel Ángel Arbaizar, ha optado por el juramento en un acto donde tanto PP como Vox han presentado sendas candidaturas a la alcaldía. Lo hacían inmediatamente después de que se constituyera de manera oficial la nueva Corporación del Ayuntamiento de Miranda, pero lo cierto es que pocas sorpresas se esperaban en un acto que contaba con la premisa del reciente pacto entre PSOE e IU-Podemos.

En cualquier caso, la nueva alcaldía había de ser votada y, pese a que se percibía cierta seriedad entre ambas bancadas, los resultados de la votación confirmaban lo esperado. La Mesa de Edad, formada por los concejales de mayor y menor edad —es decir, por Miguel Ángel Adrián (PSOE) y Álvaro Ruiz Vesga (PP)—, era la encargada de un recuento que ha otorgado trece votos a María Aitana Hernando (nueve procedentes del PSOE y cuatro, de IU-Podemos), siete a Sergio Montoya (PP) y uno a Miguel Ángel Arbaizar (Vox).

Así las cosas, Hernando era proclamada de nuevo alcaldesa de Miranda y procedía a prometer su compromiso, esta vez, con su nuevo cargo. La socialista volverá a liderar la gestión de Miranda con una oposición menguada en cuanto a colores políticos. A priori, solo PP y Vox representarán la resistencia a las «políticas progresistas» que la alcaldesa dice querer perpetuar en la ciudad de Miranda.

«A pesar de que hoy no es día para críticas», Sergio Montoya no ha desperdiciado la ocasión de pedir al nuevo equipo de Gobierno mayor «escucha» en cuanto a propuestas en tanto que, tal y como confesaba, los ediles azules «están por encima de cualquier sigla» y seguirán «mirando por Miranda». Arbaizar también se reivindicaba y pedía «que el nuevo equipo de Gobierno no repita los vetos a este grupo municipal» ya que también constituiría un «agravio a los mirandeses» que, con su voto, han decidido la representación de la extrema derecha en el Consistorio.

Aitana Hernando, por su parte, se mostraba abierta a ese «diálogo» ya que, tal y como ella misma verbalizaba, la ciudadanía mirandesa ha evidenciado en las urnas su deseo de entendimiento entre fuerzas políticas. «Representamos la voluntad de los mirandeses y mirandesas y hoy se ha constituido la corporación que ha decidido la soberana voluntad de la ciudad de Miranda», señalaba.

Así habrá de ser. La socialista encara una nueva legislatura con «orgullo, gratitud, fuerza e ilusión», aunque también con «responsabilidad y confianza». No en vano, ocho años al frente del Ayuntamiento son el aval perfecto para las sensaciones descritas. Solo el tiempo confirmará —o no— si esta nueva etapa en coalición con IU-Podemos, que deja al margen las críticas con una «satisfacción altísima» por el acuerdo alcanzado, es el camino de rosas por el que los socialistas siempre abogarán —puños al margen—.