Mil euros al año por gestionar las piscinas: la oferta de un pueblo burgalés

Con intención de dar más vida al municipio, Busto de Bureba también cuenta con un campin y piscinas, que en verano se llenan de vecinos y veraneantes para darse un chapuzón. Ahora, el Consistorio burebano busca a una persona o empresa que las regente por un precio de 1.000 euros anuales; es decir, 83,3 euros mensuales, aunque las piscinas sólo son de uso veraniego.

La licitación de las dos piscinas de Busto de Bureba es un concurso público que pretende ofrecer el servicio de limpieza, mantenimiento, funcionamiento y control de acceso a las mismas. A cambio, el arrendatario abonará la anualidad fijada por el Ayuntamiento en un anuncio en el Boletín Oficial de la Provincia y «recibirá las tasas de los usuarios».

La duración de este contrato será de cinco años, aunque podría haber prórroga «si hay mutuo acuerdo de las partes», reza el pliego del contrato. Asimismo, el Ayuntamiento ha establecido que los meses de julio y agosto sean de obligatoria apertura, durante los siete días de la semana y, al menos, durante ocho horas al día. Sin embargo, el arrendatario podrá extender el horario y el plazo de apertura de las dos piscinas con las que cuenta Busto de Bureba.

Respecto a la tarifa que paguen los usuarios de las piscinas de Busto de Bureba, este importe recaerá directamente en el arrendatario. Sin embargo, los precios para entrar en las instalaciones ya están prefijados por el Consistorio burebano. Por ejemplo, los abonos individuales van de los 25 a los 50 euros por año; mientras que los de familias van de seis euros por cada hijo a los 70 por matrimonio no empadronado en el municipio.

Por otra parte, el Ayuntamiento de Busto establece como criterios de selección de ofertas el precio que se ofrezca a pagar el interesado, su experiencia y solvencia en este tipo de servicios y la mejora de equipamiento de las instalaciones.

Por último, el arrendatario se compromete a conservar los jardines, las depuradoras, correr con los gastos de cloro, socorrista y análisis del agua. «El adjudicatario se obliga a tratar con respeto y cortesía a la clientela, pudiendo en caso contrario llegar a la resolución del contrato», se puede leer en el pliego. El plazo para optar a gestionar las piscinas de Busto de Bureba termina el 1 de febrero.