Mecerreyes amanece con destrozos y vandalismo tras el sábado de fiestas

Aythami Pérez Miguel

Burgos

Domingo, 27 de agosto 2023, 19:28

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El último fin de semana de agosto Mecerreyes celebra sus tradicionales fiestas de Gracias. Este domingo, el último día de festejos, el pueblo se ha despertado con destrozos y actos de vandalismo por parte de aquellos que se suponía que habían acudido a la localidad a disfrutar de las fiestas.

Dos farolas han sido derribadas, unas farolas solares que, según Pedro Alonso, alcalde del pueblo, tienen un coste de 1.700 euros. En la pared del frontón también ha aparecido un grafiti, «esto casi es lo de menos, pero aún así es coste, hay que limpiarlo y pintar de nuevo», señalaba Alonso.

Además del mobiliario urbano, las huertas de los vecinos también han sufrido daños. Han sido asaltadas, se han arrancado verduras y hortalizas, se han roto vallas, bidones y otros materiales que los vecinos tenían en sus huertas. «Esto es hacer daño por hacer daño. Las hortalizas que han arrancado estaban por el suelo. No entendemos por qué se hace esto», lamentaba el alcalde de Mecerreyes.

Las fiestas comenzaron el jueves. Durante el jueves y el viernes suele haber menos gente en el pueblo disfrutando de los festejos, «sobre todo estamos los que viven todo el año y familiares, pero el sábado todo se desmadra», explica el regidor. Durante los dos primeros días de fiestas no ha ocurrido ningún altercado, pero en la madrugada del sábado al domingo, cuando acude más gente al pueblo, se han producido los destrozos y el vandalismo.

Pedro Alonso reconoce que esta no es la primera vez que esto ocurre, «el jueves y el viernes siempre suelen ser tranquilos, pero la noche del sábado se complica, nos ha ocurrido en otras ocasiones». Señala también el regidor que desconocen por completo quién ha sido. Aunque se apunta a los jóvenes que llegan en autobuses al pueblo el sábado para disfrutar de la verbena y la fiesta, «no podemos asegurar nada», matiza el alcalde.

Con estos destrozos, que no son nuevos, Pedro Alonso reflexiona sobre cómo se podría acabar con ello. No es el primer pueblo de la provincia que sufre esta situación este verano ni tampoco en los últimos años. Comenta el alcalde que hay quien le dice que «habría que traer una orquesta menos bueno el sábado, para no animar a la gente a venir. Pero eso me parece que es castigar a todos por unos pocos. Los vecinos merecen disfrutar de lo mejor», señala.

También se baraja contratar una discomóvil para cuando acabe la verbena. «Así la gente está entretenida aquí e igual se reduce la posibilidad de que se dispersen por el pueblo y les dé por romper cosas», añade. Cuando acaba la verbena, en Mecerreyes no hay ningún establecimiento de ocio nocturno abierto. Otra de las opciones, que también se ha planteado, es pedir a los autobuses que traen a los jóvenes hasta el pueblo que acudan antes a recogerlos, «si la verbena termina a las cuatro de la madrugada y el autobús no viene a por ellos hasta las seis, tienen dos horas en las que no hay nada y algunos se divierten así», explica Alonso. El problema en este caso es que se trata de empresas privadas que funcionan según lo que el cliente contrate y pague.

Aunque Alonso recalca también «esto también es algo de cada uno y de que se enaltecen en grupo, porque hay años que hemos retirado varios remolques de basura».

La frustración de Pedro Alonso y algunos vecinos es evidente al hablar del tema. «No sabemos quién ha sido ni entendemos por qué se hace», señala el alcalde. Añade que La localidad agradece que les visiten y acuda gente a disfrutar de sus fiestas, pero «visitantes que dejen algún beneficio al pueblo, que, al menos, consuman algo en los bares, pero es que quienes acuden con autobuses llegan con sus bolsas con su bebida, no aportan nada y, algunos, además, destrozan», lamentan desde Mecerreyes.