Oña afronta una reforma integral de su casco histórico para mejorar la accesibilidad y regular el tráfico

Se va a actuar en la arteria principal, conocida como calle del Agua, aunque no se van a realizar mejoras en toda la vía sino en parte de ella. La calle lleva hasta una confluencia en la que otra vía sube hasta la conocida como 'plaza de los 12 árboles' y, el otro ramal, sigue siendo la calle del Agua. Hasta esta confluencia es donde se actuará. Se va a arreglar el firme de adoquines, se van a soterrar elementos del tentido eléctrico y de agua y se mejorará la accesibilidad de las aceras con su ensanchamiento y rebaje.

Con todo ello la entrada al centro de la tercera edad se verá renovada y también se regulará el tráfico y el aparcamiento en la plaza del Conde Sancho García, como señala Arturo Pérez, alcalde de la localidad.

La calle del Agua es una arteria muy larga y supone la entrada principal al pueblo desde Burgos, por lo que soporta mucha afluencia de vehículos, no solo coches sino también camiones y furgonetas de reparto a comercios, por ejemplo. «El adoquín ha sorportado mucha presión y vibraciones, por lo que en algunos tramos está destrozado, ahora se instalará un adoquín que no se desplaza y aguanta esta presión», señala Pérez. Pero, además, cuando llueve se forman grandes charcos.

Al ser esta la entrada principal al pueblo la obra se quiere acometer cuando menos afluencia de gente tenga el pueblo pero también tiene que acompañar la meteorología. En un breve periodo de tiempo se sacarán las obras a licitación y el regidor apunta que los trabajos podrían comenzar en la próxima primavera, en cuanto las condiciones meteorológicas lo permitan y no haya mucha afluencia de gente. Además, la otra entrada de Oña es más estrecha, por lo que, como añade Pérez «habría que habilitarla para que sea segura».

Además del firme irregular y hundido que presentan algunos tramos de la calle, la capa superficial de las aceras y los bordillos están desgastados. Por ello se renovará el pavimento de la vía, de las aceras y estas también se ampliarán, al igual que se harán rebajes para que sean accesibles para personas con movilidad reducida.

Pensando en las personas con movilidad reducida también se eliminará la escalera de acceso al Hogar del Jubilado y se rebajarán los bordillos de la Plaza del Mercado y los de la calle Maza. Dentro del objetivo de mejorar la accesibilidad del conjunto histórico de Oña también se regulará el acceso a la plaza del Conde Sancho García y se actuará en algunas aceras del Centro Cultural Nazaret y también se reconstruirá la rampa de acceso al mismo. Esta zona es la entrada al monasterio de San Salvador, un punto clave para Oña.

Dentro de este plan de viabilidad, el Consistorio de Oña también trabaja en el estudio para peatonalizar tres calles del pueblo con la intención de 'obligar' a aparcar correctamente. La calle del Pestiño, la del Convento y la plaza del Conde Sancho García son estas tres calles que serán peatonales aunque, excepcionalmente, podrán circular por ellas algunos vehículos.