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Una de las actividades que ofrecen son las vías ferratas, con guía y seguro. Pedrete Guiados
Guía de turismo activo en Burgos, profesión con demanda, pero poco valorada

Guía de turismo activo en Burgos, profesión con demanda, pero poco valorada

Pedro Carazo y Verónica Diosdado son dos guías de turismo activo en el medio rural burgalés. Las actividades organizadas de forma altruista, pero que se extienden más allá de socios de asociaciones o momentos puntuales son uno de sus principales competidores desleales

Lunes, 10 de julio 2023, 07:03

El medio rural burgalés tiene nichos de empleo que pueden ser oportunidades de negocio. Pedro Carazo y Verónica Diosdado se dedicaban a otras actividades económicas en la zona sureste de la provincia de Burgos, pero se formaron y titularon como guías de turismo activo, de ... naturaleza y medio rural y buscaron complementar sus ingresos.

Ahí siguen, en la Ribera del Duero, la comarca de Pinares y la zona de la Demanda. Hay demanda de sus servicios, pero la profesión no está valorada o, muchas veces, se 'cuestiona' que se cobre por ello. Así que, no dejan de reivindicarse como profesionales con conocimientos, titulación y que destinan su tiempo a ser guías. De forma inconsciente, les ha surgido una competencia que, en ocasiones, no está bien visto criticar.

La espeleología es otra de las actividades más atractivas. Pedrete Guiados

Pedro Carazo y Verónica Diosdado conforman Pedrete Guiados, una empresa de turismo activo que organiza actividades de espeleología, vías ferratas, rutas de naturaleza y de micología, pero también por entorno urbanos del medio rural. Dan a conocer la flora, la fauna y la geología de estas comarcas burgalesas y, también, ponen en valor los pueblos y los trabajos que en ellos se realizan. Sus actividades se centran en el parque natural del Cañón del Río Lobos, los Sabinares del Arlanza, la sierra de la Demanda, el geoparque de Las Loras y la comarca de Pinares.

La competencia

Pedrete explica que siempre le gustaron las actividades de montaña, así que se formó para ofrecerlas de forma segura y autónoma, hasta que se sacó los títulos para ser guía. En Castilla y León se exige titulación para ofrecer estos servicios y ellos las obtuvieron.

El problema, como reconoce Pedrete, así es como se le conoce en la zona, es que «los meses anteriores a junio suelo estar yo solo dado de alta. A partir de junio ya se da de alta Vero porque hay más demanda. Hay épocas en las que no hay trabajo como para dos personas», señala.

Pero también apunta en otra dirección, «a veces, lo que nos encontramos es que hay actividades de naturaleza, sobre todo las que van destinadas a un público no tan aventurero, en las que hay mucha competencia. Pero no por otros guías, sino por asociaciones que ofrecen esas actividades de forma gratuita, pero sin un responsable al frente, sin un guía que se haga cargo de si ocurre algo», lamenta. «Contra alguien que hace actividades gratuitas no puedes competir».

La divulgación y los talleres ambientales son dos pilares de estos guías. Pedrete Guiados

Porque Pedrete lo tiene claro, «con los temas de actividades en la naturaleza ocurre mucho que no se valoran las profesiones. Nuestra máxima dificultad no es que no haya demanda, el problema es que muchas veces se consideran actividades que deben ofrecerse de forma gratuita porque hay gente no profesional que lo está haciendo así. Pero cuando se ofertan estas actividades gratuitas a la gente, hay que entender que nadie se hace responsable», señala.

Las asociaciones y la gratuidad

Este guía de turismo activo en Burgos deja claro que no se refiere a esas «asociaciones de pueblos que hacen una actividad para ellos, para su pueblo, para sus socios. Eso está estupendo. A veces, nos contratan para hacer determinadas actividades más específicas con ellos. Pero cuando una asociación no deja de hacer actividades abiertas a no socios, gratuitas, sin nadie como responsable… Ahí se entra en contradicción», añade.

Para explicar más claramente a lo que se refiere, pone un ejemplo: «sé de una asociación de casas rurales que ofertaba rutas de senderismo, de forma gratuita, como complemento a la reserva. Aunque sea sin ánimo de lucro, estaban ofreciendo unos servicios para los que no tenían titulación ni permiso. ¿Qué pasa si yo, como guía turístico, ofrezco alojamiento gratis, como extra? ¿Qué pasa si habilito un espacio para alojamiento, lo ofrezco como extra, pero no me doy de alta como hotel rural? Creo que ahí se ve la contradicción», señala.

Pedrete conoce estas situaciones porque, como reconoce, ha sufrido por ello. «Durante la Semana Santa de este 2023 hemos tenido alrededor de un 20 % de cancelaciones por este motivo. La gente venía varios días a la zona, tenía contratados servicios con nosotros y cuando los cancelaban nos reconocían que habían visto actividades similares y gratuitas». Esto supone un agravio para estos guías turísticos, porque por su tipo de trabajo no pueden realizar muchas actividades en una jornada ni tampoco acceder a última hora a otros clientes. Así que, esta Semana Santa pasada solo ha trabajado como guía turístico Pedro.

La divulgación

Si algo caracteriza las actividades de Pedro y Vero es la divulgación. Como vecinos de la zona en la que trabajan, se encargan de poner en valor los pueblos y ecosistemas, no solo durante las rutas o actividades, también imparten talleres medioambientales en colegios de Aranda de Duero.

Pero lo que quieren señalar es que sus actividades siempre se realizan con «gente titulada que explica la fauna, la flora, la importancia de los pueblos, de los trabajos. Vamos con seguro por si al cliente le ocurre algo. Tenemos formación en primeros auxilios».

Dependiendo de las actividades, unas las guía Pedro y otras Vero, ya que cada uno está formado en una titulación. Pedro y Vero van a continuar apostando por este empleo, porque eso supone apostar por el pueblo en el que viven y por algo que les apasiona como es enseñar a la gente, divulgar, dar a conocer una naturaleza que conocen y aprecian.

«En esta zona el trabajo es muy necesario. Parece que está mal visto que cobremos por lo que hacemos, pero es un trabajo más y tenemos que cobrar por ello. Son nuestros conocimientos y nuestro tiempo. Al final, con el tiempo nos han ofrecido trabajo en otros sitios más receptivos donde se valora más el trabajo de los guías turísticos del medio rural», señala.

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