El fuego provocado por un rayo en Villagonzalo calcina 30 hectáreas de terreno agrícola

El fuego se iniciaba en término de Villagonzalo-Pedernales, en parcelas próximas a la carretera de Arcos y el Bulevar, y el fuerte viento lo acercó hacia la capital, han explicado los Bomberos de Burgos. El origen fue un rayo, tal como ha comunicado un compañero al parque municipal, que fue el primero en dar la voz de alarma. Luego llegaron decenas de avisos pues la impactante columna de humo se veía desde buena parte de la ciudad.

Como suele ser habitual, los avisos eran algo caóticos. Los Bomberos de Burgos salieron con una primera dotación, una autobomba con seis efectivos, con dirección al camino de San Zoles, explican desde el parque municipal. Poco después salía la segunda dotación, aunque en esta ocasión dirección a Arcos, pues se hablaba de otro fuego u otro foco, aunque no existía tal y se reconducían al camino de San Zoles.

En el lugar estuvieron trabajando los bomberos de Burgos junto con efectivos de Medio Ambiente, tanto terrestres como aéreos (2 agentes medioambientales, cuadrilla terrestre, autobomba). Y Se contó con un helicóptero que estuvo tomando agua de las piscinas de Villagonzalo-Pedernales, explican los vecinos. Y contó también con la ayuda a maquinaria agrícola, en concreto tractores, que estuvieron realizando cortafuegos para perimetrar el incendio.

El fuerte viento que sopló este jueves, junto con las altas temperaturas y la proximidad a algunas viviendas, llenaron de preocupación al operativo de extinción de incendios, aunque el fuego se consiguió controlar con cierta rapidez. Además, las lluvias que cayeron a última hora del día, junto con un cambio de dirección, facilitaron la extinción del fuego.

Sobre la misma hora, minutos antes de las ocho, se declaró otro incendio en Burgos capital, que quemó 0,53 hectáreas de rastrojo, y se dio por extinguido a las nueve y cuarto de la noche. Además, en Quintanilla del Agua y Tordueles se registró otro fuego, que se inició a las nueve de la noche, aunque una hora más tarde se apagó, sin apenas causar daño.