Socios y familias de Aspanias en Burgos respondieron en una carta al presidente de la Fundación, Juan José Rodríguez Villarroel, y denunciaron los impagos que se arrastran y también la falta de mantenimiento de las instalaciones y equipamientos, «que se deterioran día a ... día».
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En un comunicado, la organización indicó que «Aspanias saldrá adelante y tiene futuro», porque las personas pasan y la verdadera misión de la entidad es «lo suficientemente fuerte como para aguantar todos estos envites». «Nosotros creemos en su éxito, pero con una gestión adecuada», apostillaron.
Como propuestas plantearon la dimisión de los órganos de gobierno; designar una comisión gestora; aplicar el Plan de Trabajo propuesto por Plena Inclusión, avalado por la Consejería, que contempla, entre otras cosas, una Auditoría e Inspección de Cuentas externa, y cambiar el Comité de Dirección.
«¿Cómo puede provocar un choque frontal con la Consejería, que aporta siete millones de euros al año, alegando que los ocho expedientes abiertos por la Junta, por pérdida de calidad de servicios e instalaciones donde están nuestros familiares, es una campaña de acoso y derribo, injusta y cruel?», concluyen.
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