Las acusaciones de deslealtad por parte del Partido Popular contra Ciudadanos en la Junta de Castilla y León, y la ruptura del acuerdo de gobierno, no han dejado indiferentes a los interlocutores de ambas formaciones en otras instituciones en las que también gobiernan en coalición. ... Es el caso de la Diputación de Burgos, que preside el 'popular' César Rico y vicepreside Lorenzo Rodríguez, Cs.
Rodríguez asegura que el pacto de gobierno goza de buena salud. Se han superado los encontronazos de los primeros momentos, porque el PP se ha acostumbrado a gobernar en coalición, y Cs considera que su paso por la Diputación está cambiando una institución que vivía anclada en el pasado. El vicepresidente insiste en que Cs no busca réditos políticos, al mismo tiempo que critica que el PP haya convocado elecciones en Castilla y León, y aunque reconoce que el «cuerpo» habría pedido romper todos los acuerdos, no sería «justo» para los ciudadanos de los municipios de Burgos.
-¿El terremoto de la Junta de Castilla y León se ha notado en la Diputación de Burgos?
No se ha llegado a notar tanto como algunos esperaban pero sí, siempre influye en la relación entre Cs y PP. Pero como es un pacto estable, seguimos trabajando con la misma normalidad.
-¿Cómo ha influido?
Se ha comentado qué va a pasar, qué van a hacer los partidos... Nosotros siempre lo hemos tenido claro. El presidente y yo hablamos todos los días y tenemos la confianza mutua de seguir trabajando, porque cuando se hacen las cosas bien se nota. No se tiene que abordar una provincia desde una perspectiva nacional.
-Me dice que hablaban a diario pero, tras los acontecimientos de la semana pasada, ¿se han sentado a hablar específicamente del futuro de la Diputación?
Nos reunimos el lunes, hemos estado hablando hoy (por el martes). Vemos cómo está la situación. Pero la conclusión que compartimos es que es un pacto estable, con buena salud y vamos a seguir trabajando para ello.
-¿Lorenzo Rodríguez no teme acabar como Francisco Igea, entonces?
No, no tengo miedo. Di mi palabra de apoyar este pacto durante cuatro años. Tengo muy claro cuál es nuestra posición, trabajar por la provincia. Se están haciendo las cosas bien y el Partido Popular ha llegado a entender lo que es un pacto. Hemos llegado a poder integrar dos partidos en un equipo de Gobierno. Puede haber discrepancias pero lo hablamos siempre y nos respetamos. No podemos acabar como se ha acabado el pacto con Cs en la Junta de Castilla y León. El Partido Popular ha roto el pacto diciendo que Cs ha sido desleal, pero no es verdad. En marzo, cuando la moción del PSOE, Cs demostró su apoyo al Gobierno. Y Francisco Igea lo ha dicho muy claro, la política regional o nacional no tiene que influir en los pactos PP-Cs en la provincia de Burgos.
«Hemos llegado a poder integrar dos partidos en un equipo de Gobierno. Puede haber discrepancias pero lo hablamos siempre y nos respetamos»
-Usted sigue fiel al pacto pero lo ocurrido en la Junta es que el PP lo ha roto. Insisto, ¿no tiene miedo Cs de que el presidente de la Diputación haga lo mismo que Fernández Mañueco?
La intención del presidente, en lo que me dice y hablamos, no es esa. Si mañana el PP cree oportuno y necesario romper el pacto, nos lo tendrá que decir, pero de momento creo que la estabilidad que tenemos no deja abierta ninguna puerta a la ruptura.
-Hablaba de que han conseguido formar un gobierno integrado, ¿podría entenderse que, de cara a las elecciones municipales de 2023, PP y Cs pudieran ir unidos?
No, no podemos equivocar. El Partido Popular es el Partido Popular y tiene su ideología como nosotros tenemos la nuestra. Cuando llegas a un acuerdo de gobierno, cada uno tiene que ceder. Cs llegó con las ideas claras sobre lo que había que cambiar en la Diputación. El PP llevaba gobernando muchos años pero ha querido entender lo que significa un pacto entre dos partidos y eso es lo principal. Nosotros veníamos a hacer un equipo y a trabajar, aunque sea con ideas diferentes. No venimos a ver si nos van a volver a votar. Desde el primer momento, Cs sabía el lugar que tenía que ocupar, el trabajo que tenía que hacer y lo estamos haciendo. No perdemos tiempo en votaciones o puestos.
-Habría sido lógico que, tras lo ocurrido en la Junta, Cs hubiera decidido romper todos los acuerdos que tenía con el PP en Castilla y León. No lo ha hecho, ¿cree que esa postura les beneficiará?
Lo que pedía el cuerpo era romper el pacto pero Cs lo ha dicho bien claro. Estamos trabajando por la provincia. Hay alcaldes del Partido Popular que están gobernando con Cs pero sin entrar en el gobierno municipal. Eso quiere decir que nunca nos ha importando estar o no en los gobiernos, sino las políticas en los municipios. Y no puede ser que por un interés nacional de adelantar las elecciones regionales volvamos a perjudicar a los ciudadanos, rompiendo el pacto en la Diputación o en ayuntamientos. Sería injusto para los municipios que los vecinos tengan que pagar los vaivenes políticos, que están buscando réditos políticos para impulsar a candidatos nacionales. Yo creo que no era el tiempo de adelantar las elecciones con la sexta ola, lo que estamos viviendo en sanidad y el dinero que viene de Europa. Vamos a tener un problema si llegamos a perder estos fondos.
-El sondeo publicado por El Norte de Castilla el pasado domingo recoge unos resultados francamente malos para Cs. Se quedarían con un único procurador. ¿A qué cree que se debe esa pérdida de confianza de los ciudadanos?
Las encuestas marcan tendencias. Y esta tendencia nos indica que no vamos a tener el apoyo que tuvimos en 2019 con 13 procuradores. Yo prefiero esperar a que se abran las urnas pero si los ciudadanos entienden que no nos tienen que dar el voto, nosotros tenemos que entender que se ha hecho algo mal. Cs cogió carteras que no son precisamente bonitas. Teníamos a la consejera de Sanidad, Verónica Casado, cuya gestión de la pandemia le reconocen los ciudadanos. ¿Ha faltado comunicación? Pues no lo sé. Otros partidos vienen a pasar el rato, a buscar votos. En Cs venimos a trabajar mucho y no explicamos o no lo hacemos llegar a los ciudadanos. Ahora más que nunca, Castilla y León necesita a Cs para continuar con el impulso de cambio que se ha visto en la Junta.
«Sería injusto para los municipios que los vecinos tengan que pagar los vaivenes políticos, que están buscando réditos políticos para impulsar a candidatos nacionales»
-Comentaba que en la Junta, los consejeros se han llevado áreas complicadas. En Diputación, usted también se ha responsabilizado de Personal. ¿Qué está pasando en Personal que, constantemente, hay problemas con los sindicatos y el comité de empresa?
Como vicepresidente podía no haber cogido Personal, pero quise encargarme del área porque creía que había que hacer cambios. He llegado y me gusta tomar decisiones. No he venido a sentarme y firmar papeles. Yo voy a defender siempre a los trabajadores y a la Diputación. Ya sé que cuesta mucho tomar decisiones. Me he encontrado con gente que me ha advertido de que, algunas decisiones, no van a traernos votos. Pero yo no estoy para tomar decisiones que den votos, sino para defender a los trabajadores (aunque algunos crean que no). Problemas no hay. Se va a hacer una valoración de puestos de trabajo que llevaba 20 años sin hacerse. Yo he marcado una línea de diálogo en personal, aunque llegar a acuerdos cuesta.
-¿Cómo valora estos dos años y medio en la Diputación de Burgos?
Muy positivamente. Además de ser vicepresidente y el responsable de Personal, soy el presidente de Sodebur y creo que estamos recogiendo los frutos del trabajo realizado. Grandes proyectos, cambios en la gestión. El acuerdo de gobierno contaba con 66 medidas, de las cuales, el 95% se van a cumplir. Y en la provincia nos felicitan la labor que está haciendo Sodebur. Y en las residencias se está haciendo una gran labor. La de Burgos ha sido la primera diputación en contar con el plan antifraude... Todo no se puede hacer en dos años, pero estamos muy contentos y creo que este pacto podrá llegar a 2023 con la misma salud que tiene ahora porque el Partido Popular y Cs trabajamos con mucha ilusión.
-¿Ha cambiado la forma de gestionarse con la entrada de Cs? ¿Póngame algunos ejemplos?
Ha habido cambios importantes. Cuando entramos dijimos que queríamos cambiar los planes provinciales, agilizar las convocatorias, los convenios, cambiar la atención a los municipios y la digitalización del medio rural. Hay otro aire en la Diputación y eso es gracias a Cs, que entró con unas ideas, pero también al Partido Popular, que ha visto que se pueden cambiar las cosas, y lo estamos haciendo entre los dos partidos. En cuatro años, los municipios de la provincia van a ver las mejoras en la Diputación y en sus propios territorios.
-¿La bicefalia que denunció al principio del mandato ya se ha pasado?
En el 2019, cuando entramos a gobernar, el PP estaba acostrumbrado a gobernar en mayoría. En Cs no venimos a ocupar una silla. Como vicepresidente, vengo a tomar decisiones y dar solución a los problemas de la Diputación. Y esas soluciones deben pasar por el equipo de Gobierno, por el presidente y el vicepresidente, y a eso cuesta acostumbrarse. Yo siempre he entendido quién es el presidente de la Diputación y nunca he tomado una decisión sin contar con él. Al principio había problemas porque se tomaban decisiones sin comunicarlo a Cs y no se puede entender que se tomen decisiones en Diputación de las que nos tengamos que enterar en una Junta de Gobierno. Cs tiene que saber lo que se va a hacer en todas las áreas de la Diputación. Me alegro de haber hecho este pacto, no me arrepiento y seguiremos con él. No tengo la bola mágica, pero llegará a 2023 porque Cs seguirá trabajando.
«Cs es leal, aunque tiene su autonomía. Si en alguno momento entendemos que las cosas no se están haciendo bien, no tendremos ningún problema en pasar a la oposición»
-¿Y en 2023, se podrá reeditar el pacto?
Tendrá que haber elecciones municipales y son los concejales los que tienen que dar su opinión. Nosotros creemos que somos muy necesarios y en los ayuntamientos donde está Cs ha habido un cambio enorme, así que seguiremos trabajando en la provincia. Cs está dejando muy buena impresión y la gente se felicita del cambio en sus municipios.
-Llegarán a un grado de cumplimiento del 95% en el acuerdo de gobierno, ¿qué quedará pendiente?
Nos queda pendiente el plan provincial de bomberos, que estamos trabajando en ello. La oficina de atención al ciudadano, que va con retraso. Cosas puntuales. En la Diputación se está notando la mano de Cs y el PP ha entendido que gobierna con un partido que es diferente, pero que es leal, aunque tiene su autonomía. Si en alguno momento entendemos que las cosas no se están haciendo bien, no tendremos ningún problema en pasar a la oposición. Si tenemos que romper el acuerdo, tanto por mi parte como por la del presidente, creo que nos sentaríamos y lo hablaríamos.
-No se comunicará por un tuit ni le pillará a uno en una entrevista en la radio....
Siempre que ha habido un problema, lo hemos hablado. Hemos tenido discusiones, días duros, pero se dialoga. Cs también ha tenido que ceder en cosas.
-¿Cómo valora a la oposición?
Es una oposición vacía, sin ilusión por la provincia, que solo vale para estar detrás de las pancartas. Es la oposición del no por el no, sin aportar nada. El PSOE está hace mucho años en la Diputación sin ambición, sin querer cambiar la forma antigua y esta institución está avanzando. Su portavoz, David Jurado, está centrado en el Ayuntamiento de Burgos porque ser concejal de Hacienda necesita 22 horas al día, pero una persona no puede estar en dos sitios a la vez. Cuando uno tiene ilusión por la provincia, el portavoz está en la Diputación, se le da prioridad, y hoy por hoy está centrado en Hacienda.
-¿El nombramiento de Borja Suárez como presidente del PP de Burgos se ha notado en la Diputación?
Eso es una pregunta que tendría que responder el PP. César Rico sigue siendo el presidente de la Diputación y seguimos hablando con él. También con Borja Suárez. En el PP sabrán si ha habido cambios, en la Diputación no porque nosotros el pacto lo tenemos con el PP y, de momento, las decisiones las sigue tomando César Rico, que es mi interlocutor. Y aunque nos cambien el representante no vamos a cambiar la hoja de ruta, porque también se negoció con Borja Suárez. Si ellos quieren cambiar la hoja de ruta, no lo vamos a aceptar.