Detenido por estafar más de 3.500 euros en Burgos con la venta online de un perro

Los hechos se remontan al pasado mes de enero, cuando un vecino de la comarca del Arlanza denunciaba haber sido víctima de una estafa en la compra de un perro. Éste, interesado en la adquisición de un cocker spaniel, fue atraído por el anuncio aparecido en una conocida página web de compra/venta entre particulares. Una vez se acordó el precio del animal, ingresó el importe pactado por transferencia bancaria en una cuenta facilitada por el vendedor.

Tras el desembolso de esta cantidad económica, bajo engaño, la empresa transportista que resultó ser ficticia, le requirió el abono de sumas adicionales que debía igualmente ingresar en otras cuentas bancarias, en concepto de cargos por transportes, aduanas y seguros. En total pagó 3.585 euros por una mascota que nunca recibió.

A pesar de lo que piensan los autores de este tipo de delitos cometidos vía online (denuncias falsas, estafas, timos o ventas fraudulentas…) y equivocadamente amparados por el supuesto y falso anonimato que proporciona Internet y las nuevas TIC, ningún ilícito realizado a través de la web queda impune ya que siempre existe lo que se denomina 'huella digital'.

El equipo de asesoramiento, prevención y respuesta en materia de ciberdelincuencia de la Comandancia de Burgos abría una complicada investigación y analizaba minuciosamente las transferencias efectuadas.

El estudio de la información obtenida y las indagaciones llevadas a cabo en relación a las evidencias ('huella digital') dejadas por el principal implicado para perpetrar su estafa, ha conducido a los investigadores hasta el presunto autor de los hechos que ha sido identificado, localizado y detenido en una localidad costera de Cantabria.

Las diligencias han sido entregadas en los Juzgados de Santoña, donde adicionalmente se ha solicitado a su Titular el bloqueo policial de las cuentas bancarias utilizadas y la congelación cautelar del saldo existente.

Ningún ilícito cometido a través de la web o en el que se pretende obtener una indemnización del seguro, encubrir negligencias o descuidos, del orden de las estafas, timos o ventas fraudulentas, queda impune, a pesar de lo que equivocadamente piensa el autor/es enmascarado bajo el supuesto y falso anonimato que proporciona, por ejemplo, internet y las redes sociales; existe la denominada 'huella digital'.

Para este tipo de conductas nuestro Código Penal contempla penas que aplicadas en su grado máximo pueden suponer multa de tres meses y prisión de tres años.