Los delitos de odio se frenan en Burgos, que lidera la estadística de Castilla y León

Durante el pasado año 2019, en Burgos se registraron 18 infracciones tipificadas como delitos de odio, de las cuales, 17 fueron penales y 1 de tipo administrativo, de acuerdo con los datos facilitados por el Ministerio del Interior. La cifra es ligeramente inferior a la acumulada en 2018. Entonces fueron 21 los delitos de odio registrados, el dato más alto de los últimos cinco años, en los que se ha ido detectando un progresivo incremento (de 7 casos en 2015 a 21 en 2018).

Los 18 delitos de odio registrados a lo largo del pasado año, con 16 víctimas, corresponden en su mayoría a actos xenófobos o racistas. En concreto, 6 del total están encajados en esta tipología. También se han contabilizado 3 acciones contra la orientación sexual e identidad de género y 5 por motivos idelógicos. Han sido dos atentados contra creencias o prácticas religiosas y otros dos por aporofobia (fobia a las personas pobres o desfavorecidas).

Entre los delitos cometidos se encuentran actos racistas, xenófobos o intolerantes en el deporte, amenazas, coacciones, ataques a la libertad de conciencia y los sentimientos religiosos, descrédito, menosprecio y humillación a víctimas de la vilencia de género o trato degradante. También, injurias, discriminación, malos tratos en el ámbito framiliar, robo con violencia e intimidación daños, en todos los casos bajo el denominador común del delito de odio.

En cuanto al lugar en el que se cometieron los actos delictivos, 9 de ellos tuvieron lugar en la vía pública, pero 2 se registaron en domicilios, uno en un establecimiento y dos en un campo de fútbol o instalación deportiva. Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado han detenido, en 2019, a 4 personas por delitos de odio en Burgos y se han esclarecido, además, 9 actos delictivos.

Burgos es la provincia de Castilla y León que registra un mayor número de infracciones por delitos de odio, pues esas 18 del pasado año están por encima de las 13 de León o las 12 de Valladolid. Fueron 11 en Ávila y Salamanca, mientras que en Palencia, Zamora y Soria están por debajo de la decena (7, 4 y 2, respectivamente) y en Segovia no se registró ningún acto constitutivo de delito de odio.