El consejero de Economía confía en la «sólida base» de Burgos para iniciar su recuperación

Ha destacado, igualmente, la industria farmacéutica de la capital burgalesa y de Aranda de Duero, «con peso extraordinario». En cambio, Carriedo ha señalado que el sector del automóvil, con fuerte presencia en Burgos, está sufriendo la falta de suministro y el desabastecimiento de elementos por una situación coyuntural que afecta a nivel internacional.

El consejero de Economía asegura que Castilla y León ha comenzado la recuperación económica después de cinco trimestres consecutivos de recesión. «El segundo trimestre de 2021 ha sido el primero con crecimiento económico. Hemos crecido en término interanuales un 18 por ciento, una cifra alta», ha apuntado Carriedo. Pero Castilla y León apenas ha recuperado el 44 por ciento de lo perdido durante esos cinco trimestre de recesión. Por tanto, «tardaremos algún tiempo en alcanzar el nivel que teníamos antes de la crisis». El consejero apunta a 2022 como año en el que Castilla y León superará el nivel de actividad que tenía en el año 2019, previo a la pandemia de la covid-19.

La inflación, en cambio, no es un dato positivo par ala región. Carriedo asegura que el alto coste de la energía está repercutiendo en las familias y en las empresas. Estas están teniendo «dificultades para mantener la actividad y el nivel de margen de beneficio y traducir este aumento de coste a los mercados», ha especificado. Además, las empresas castellano y leonesas están sufriendo el incremento del coste de materias primas, el desabastecimiento de algunos productos y los cambios estructurales y de tributos realizados por el Gobierno, «que están generando inquietud y preocupación».

Aún así, Carriedo ha asegurado que estamos en un «momento de recuperación con crecimiento económico, aunque todavía insuficiente para alcanzar el nivel que tuvimos antes de la pandemia». Defiende el consejero de Economía que la Junta aporta en esta tesitura «estabilidad» al haber aprobado el techo de gasto, «paso para poder aprobar el presupuesto de 2022».

En su programa para la región en materia económica destaca el objetivo de la reducción de impuestos. Carriedo se ha enorgullecido de que la región sea «la cuarta comunidad autónoma con menos impuestos de España, la cuarta comunidad en competitividad fiscal y la que más puestos ha avanzado en competitividad fiscal. Nuestra idea es seguir reduciendo impuestos. Sobre todo los relacionados con las transmisiones patrimoniales de bienes inmuebles asociados a la actividad económico y productiva en el medio rural».

En cuanto al replanteamiento del medio rural, como propone el informe de CaixaBank Research, Carriedo no ha profundizado en ello. Se ha limitado a señalar que «la prioridad con los fondos europeos es la lucha contra la despoblación, tienen que llegar al mundo rural y a todo el territorio, servir para la conectividad del mundo rural y prestar servicios en condiciones de igualdad».

Para Carriedo hay que repartir los fondos «en función de los habitantes pero también de sus condiciones. El coste de los servicios se dispara con la dispersión, pero respetamos la libertad de los ciudadanos de residir donde deseen y estamos convencidos de que tenemos que prestar servicios a las personas allá donde residan».