Secciones
Servicios
Destacamos
Últimos ensayos y más nervios que nunca. Ya ha llegado la fecha para la representación teatral en Santa Gadea del Cid y, como no podía ser de otra manera, ya está todo preparado para ofrecer lo mejor al público este sábado, a las 19: ... 30 horas. Ya son trece años de experiencia y trabajo en esta localidad burgalesa que se vuelca cada verano en preparar una obra medieval, de la mano de la Asociación Teatral Fuerza y Honor.
¿Sabían que hace tiempo se celebró un juicio que enfrentaba lo antiguo contra lo moderno? Este evento regresa a la actualidad, pero los asistentes pueden hacer un salto al pasado si acuden a la cita del próximo sábado. Se trata de la obra 'En busca del alma perdida' que encarna un juicio entre Vetusta contra Tecnos, madre e hijo pertenecientes a la familia Pernanbuco. Dos posiciones enfrentadas por mundos distintos y que también «vivimos día a día, tanto con nuestros familiares como con nosotros mismos», explica Susana Ortiz, escritora y directora de la obra.
La gente del pueblo es la encargada de hacer posible esta cita. Ellos mismos representan e incluso escriben la obra, desde los más pequeños a los más mayores. «Es increíble como chavales de entre 9 y 13 años son capaces de ensayar en verano, porque les quita de otras actividades, y de enfrentarse a tantas personas con textos importantes», apunta Ortiz. Ellos son parte del elenco, que lo forman alrededor de 60 personas y que se complementa con animales, como caballos, que hacen más rica la representación.
Cada una de estas personas está ahora mismo «atacada», confiesa la directora, pues se acerca el gran día. Además, hay una dificultad añadida y es que «es muy complicado ensayar todos a la vez, pues cada uno es de un sitio de España y el pueblo sirve de unión». Sin embargo, consiguen que sea un éxito, pues alrededor de 1.300 personas acuden a disfrutar de esta obra teatral que convierte a la plaza del pueblo en un escenario medieval.
En esta ocasión, la obra representada es la misma que se hizo el pasado año. «Esto no tiene que servir como detrimento para la gente pues, aunque la base sea la misma, todo aquel que se siente va a ver algo diferente», asegura Ortiz. Y es que, en su opinión, el éxito de este evento es «enganchar al espectador ofreciendo en cada ocasión algo diferente». Esta vez la obra pretende hacer reflexionar y no dejar indiferente con puntos divertidos en contraposición a escenas con trasfondo muy emocional.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.