Seis pueblos de Burgos paralizan una obra que alejaría 30 kilómetros los servicios básicos

Los alcaldes de la zona aseguran que les han avisado con poco tiempo de antelación, sin opción a proponer alternativas. Han conseguido que este lunes 11 de diciembre no se corte la carretera, aunque estaba programado, y se han emplazado a una reunión para observar alternativas.

El pasado jueves 7 de diciembre, la Diputación de Burgos informó al Ayuntamiento de Estépar de que este lunes 11 de diciembre se cortaría la carretera que une este pueblo con los de la zona de Muñó: Villavieja de Muñó, Arroyo de Muñó, Quintanilla Somuñó, Mazuelo de Muñó y Arenillas de Muñó. El motivo era la realización de obras en el puente que salva el río Arlanzón con el objetivo de dar servicio y facilitar los transportes involucrados en la construcción del parque eólico La Muela-Santiuste I. El corte estaba previsto entre los días 11 y 22 de diciembre, ambos incluidos.

«Nos enteramos el jueves, cuando ya no había nadie en el ayuntamiento, en pleno puente de la Inmaculada. Avisé a los pueblos afectados. A todos nos pilló por sorpresa. Creíamos que teníamos que hacer algo y por eso nos hemos juntado y hemos protestado», explica Jaime Martínez, alcalde de Estépar.

Los vecinos de estos pueblos de la comarca acuden a disfrutar de los servicios a Estépar, la cabecera. Médicos, tiendas, ocio, gasolinera, todo lo tienen en Estépar. Ahora recorren, como mucho, nueve kilómetros, el pueblo más alejado, para llegar a Estépar por esta carretera que se quiere cortar. Otros están apenas a 2,5 kilómetros. Estos se convertirán en más de 30 kilómetros.

«A los vecinos de Estépar no nos afecta, pero aquí funcionamos como comarca. Pero molesta también la forma de hacerlo, con poco tiempo de aviso y sin dar alternativas. No es normal», asegura el regidor de Estépar.

Alberto Azofra es el alcalde de Quintanilla Somuñó, a cinco kilómetros de Estépar que, con el cierre de la carretera se convertirán en unos 30. En vez de siete minutos, tendrán más de media hora.

«Dejamos a unos pequeños pueblos sin conexión. Nuestra unión con la A-62 es por esta carretera y la vida la tenemos montada en Estépar, es el centro neurálgico. Vivimos, en realidad, como si fuéramos una urbanización de Estépar. Cortan este puente que nos da acceso a estos cinco municipios y somos poca gente, pero tenemos derechos», lamenta el alcalde de Quintanilla.

Jaime Martínez, regidor de Estépar, explica que entienden que la empresa tenga que hacer la obra, pero lamenta que no se haya contado con la comarca para este corte de la vía. En la reunión convocada para el martes, tras evitar el cierre este lunes de la carretera, se propondrá a la empresa una alternativa. «No sabemos si acudirá alguien de Diputación, pero sí lo hemos confirmado con la empresa», confirma Martínez.

En esta reunión se propondrá una alternativa, «una alternativa que podríamos haber planteado antes si nos hubieran avisado con tiempo y no se habría optado por hacer las cosas rápido». La alternativa es adecuar un camino agrícola que comunica Villavieja con Cavia. «Es un camino agrícola que está bien, habría que limpiarlo un poco e, igual, echar zahorra en algún punto. Así, harían más kilómetros que ahora, pero se podría soportar durante unos días, no como todos los kilómetros que tendrían que hacer. Esta sería nuestra alternativa y lo que propondremos. Pero para eso la empresa también tiene que estar dispuesta a esperar a comenzar las obras. Podrían empezar por otros trabajos alrededor del puente mientras se adecúa este camino», explica el regidor de Estépar.

Azofra, alcalde de Quintanilla y también diputado provincial por el PSOE, explica que este corte de la vía se realiza para actuar en un pequeño tramo, de unos 350 metros, pero crucial, porque es el puente que cruza el Arlanzón. Aclara, además, que el ensanche es una autorización de la Diputación para que actúe una empresa privada y realice esta ampliación.

Tras la protesta y la concentración pacífica de vecinos y alcaldes de la zona ante el cierre de la vía, este se ha aplazado. La reunión de este martes juntará a las partes y la comarca podrá proponer sus alternativas ante este inconveniente que perturbará la rutina de los vecinos de esta comarca burgalesa. Azofra adelanta que, como mínimo, «deberían posponer las obras hasta enero por la importante afluencia de tráfico y visitantes que se espera que reciba la zona en las próximas fechas».