Casas señoriales y mucha historia alrededor de Huérmeces

Casas señoriales, el Torreón de los Amigos o la iglesia de San Juan Bautista, son algunos de los atractivos que ofrece al visitante la localidad burgalesa de Huérmeces. A escasos 30 minutos desde la capital burgalesa, la población destaca por un cuidado conjunto histórico que precisamente ha sido declarado recientemente Bien de Interés Cultural.

En la villa de Huérmeces destaca un conjunto histórico de primer orden conformado por casas señoriales, entre las que brilla con luz propia el Palacio de los Fernández Zorrilla además de un conjunto de casonas blasonadas. No hay que olvidar la Torre de los Padilla o Torreón de los Amigos, cuyos restos se encuentran en las afueras de la población y que aún conservan vestigios de su recinto fortificado. A todo ello se suma la iglesia de San Juan Bautista, uno de los elementos urbanos y edificios más destacados de Huérmeces, por constituir una de las escasas representaciones de arquitectura religiosa neoclásica en la provincia de Burgos, además de la primera obra conocida del arquitecto Fernando González de Lara.

Ubicada en el noroeste de Burgos, en la salida del desfiladero del río Urbel, tiene su origen en la Alta Edad Media cuando comenzó a conocerse con el nombre de Gormeces. Con el paso del tiempo, Huérmeces adquirió un brillo arquitectónico propio del que hoy dan cuenta muchas de las casas señoriales de la villa.

A unos 500 metros del pueblo se ubica una de las casas señoriales más destacadas de la villa: el Palacio de los Arriaga-Salamanca. Muy cerca podemos contemplar otra gran muestra de arquitectura señorial: el Palacio de los Fernández Zorrilla. Se trata de una edificación barroca del s XVIII compuesta por dos torres gemelas de tres pisos.

No menos destacable es la Torre de los Padilla o Torreón de los Amigos, que se construyó como elemento defensivo. De la torre aún se conservan dos lienzos enteros y una parte y arranque de otros dos, perforados con saeteras y por un vano adintelado.

Si hay algo que destaca en el conjunto urbano es la armonía y la unidad, unida a un buen estado de conservación. En él se ubican buena parte de las casonas o casas señoriales junto a otros ejemplos de la arquitectura popular del páramo que forma parte del famoso Geoparque de las Loras.

Es en ese casco histórico en el que se ubica la iglesia de San Juan Bautista, reedificada en el s. XVIII por el arquitecto Fernández González de Lara, sobre un edificio anterior gótico. Alejado del mismo se encuentra otro punto que hay que visitar si se acude a Huérmeces: la ermita de Nuestra Señora de Cuesta Castillo, que según cuenta la leyenda pudo encontrarse junto a un castillo.

Leyendas e historias se dan la mano en una población que también ofrece varias rutas naturales. Los amantes de la naturaleza pueden elegir entre realizar la

Ruta a las Cuevas de Valdegoba o disfrutar de un paseo por la profunda y estrecha garganta del Cañón del Río Úrbel.

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