Las viviendas de la urbanización abandonada de Cardeñadijo empiezan a ser «un verdadero problema» para los vecinos. Así lo expone uno de ellos, que considera peligroso el estado en el que se encuentran. Esta zona, situada en un cerro del municipio, es un territorio fantasma ... aprovechado por los jóvenes para realizar fiestas y por algunos okupas como refugio. El domingo ardieron dos de ellas, un incendio que, debido a la cantidad de basura acumulada, provocó que los bomberos tuvieran que emplearse a fondo para extinguirlo.
Publicidad
Este suceso ha vuelto a poner sobre la mesa un problema del que muchos habitantes del municipio están hartos. «Pondría dinero de mi bolsillo para que se derribaran de una vez», manifiesta un habitante de una vivienda cercana. En una de las unifamiliares que ardió vivía desde hace tiempo una pareja y, en la contigua, otro hombre pero, afortunadamente, en el momento del siniestro ninguna de las tres personas se encontraba en el pueblo.
Pero no son seguras, su estado fue declarado ruinoso recién construidas y, desde entonces, quedaron abandonadas a su suerte. Hoy presentan un estado de completa dejadez y, según algunos ciudadanos que se han acercado hasta allí, «no da buena espina». El estado de esta urbanización es un reflejo del ánimo de las personas que invirtieron su dinero y depositaron sus ilusiones en estas viviendas y que hace diez años vieron cómo se esfumaban.
48 unifamiliares en las que nunca llegó a vivir nadie porque, recién construidas, «en varias de ellas se detectó un movimiento de los cimientos», explica un miembro de la cooperativa, por lo que se decidió que ninguna era segura para ser habitada. El caso acabó en los juzgados y finalizó con la indemnización de las personas que habían invertido sus ahorros en estas parcelas.
Noticias relacionadas
Formaban parte de una promoción de la cooperativa promotora Solidel. Cuando esta quebró los derechos de la parcela pasaron a la Sociedad de Gestión de Activos procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb) o más conocido popularmente como «el banco malo». Frente a estas viviendas se encuentra otra urbanización con 31 casas pertenecientes a la misma promoción que sí salieron adelante, aunque las que no se vendieron al inicio, también pasaron a formar parte de Sareb.
Publicidad
El concejal del PP en el municipio, Héctor Javier Martín, declara que «la situación empieza a ser muy preocupante porque ahora ha sido un incendio sin heridos pero si pasa cualquier cosa de quién es la responsabilidad». Por este motivo, considera que el Ayuntamiento debería «atenerse menos a cuestiones formales y tirarse al barro para solucionar la situación». Desde Cardeñadijo algunos reconocen que la Alcaldía se ha comprometido a derribar las dos viviendas siniestradas pero este medio no ha podido confirmar este dato con la alcaldesa.
Sea como fuere todos quieren una solución para este problema que arrastra el municipio desde hace demasiados años y para el que nadie ha puesto una solución en firme sobre la mesa, mientras las viviendas van deteriorándose aún más, año tras año, y suponiendo un peligro para los vecinos.
Disfruta de acceso ilimitado y ventajas exclusivas
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.