La carga del embalse de Castrovido podría reanudarse entre 2025 y 2026

Las obras de puesta en carga del embalse de la presa de Castrovido podrían reanudarse en el año hidrológico del 2025-2026. Una previsión que lanza la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) a preguntas de la Agencia Ical, y que pese a no ser una fecha muy concreta, dado el amplio margen de tiempo, da nuevas esperanzas a los vecinos de la zona de ver operativa, por fin, esta infraestructura por la que llevan esperando ya más de 20 años.

Dos décadas. Se dice pronto, pero la historia detrás de la construcción de esta presa es larga, llena de retrasos y esperas. El 23 de febrero de 2004 es un día señalando en la crónica de este embalse, dado que fue la fecha de inicio de las obras de construcción de la presa de Castrovido, una obra que empezó a tomar forma en los años 90 del siglo anterior, pero que no empezó a concretarse hasta principios del XXI.

Esta construcción tenía como objetivo principal contribuir a mitigar los daños de las crecidas, protegiendo así a las poblaciones cercanas de los desbordamientos del río Arlanza. Era por tanto un anhelo para los vecinos de la zona. Las obras de construcción finalizaron en diciembre de 2020, sin embargo, a fecha de hoy, 8 de diciembre de 2024, sigue sin estar completamente operativa.

Tras años de desvelos, el 25 de junio de 2021 todo parecía ir viento en popa. Así lo acreditaba el acto de puesta en marcha que se celebró en este emplazamiento y que contó con la presencia del secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, entre otras autoridades. Se iniciaba así la puesta en servicio de este embalse con una capacidad máxima de 44 hectómetros cúbicos y una inversión total de 250 millones de euros.

Sin embargo, su puesta en marcha se vio afectada a finales del mes de enero de 2022. Según informan desde la CHD, durante el proceso de llenado de la presa, personal técnico de la citada Confederación, advirtió la existencia de un sumidero en el vaso del embalse de Castrovido, en el arroyo Vaquerizas.

«En vista de este hallazgo se detiene el llenado de dicho embalse», explican desde la Confederación, y añaden que, «ante la urgente necesidad de estudiar y sellar la zona problemática hallada en el vaso», se procedió al inicio de las 'Obras necesarias en el vaso del embalse de Castrovido para garantizar su seguridad aguas abajo de la presa', con carácter de emergencia. Se suma así una nueva fecha a la historia de Castrovido, porque el inicio de estas nuevas obras se programó para diciembre de ese mismo año. «En esos momentos se había llegado a llenar el 11 por ciento de la capacidad del embalse», apuntan desde la CHD

A preguntas de este medio acerca de si se ha podido resolver esta situación, la CHD indica que las obras ya han concluido «adelantándose al plazo previsto unas semanas». «Se ha realizado una importante labor de sellado del terreno, con el objetivo de conformar un estrato impermeable que permita reducir las filtraciones hasta valores asimilables, consiguiendo de este modo un salto muy importante en la seguridad de la presa y del embalse», indican.

Sin embargo, señalan también que la «magnitud de la zona a tratar» ha implicado que las tareas de sellado «deban continuar hasta alcanzar una cota que permita volver a iniciar el proceso de llenado hasta un cierto nivel». Unas actuaciones que desde este organismo esperan que puedan iniciarse «en breve» .

Es reseñable recordar que en enero de este mismo año, se llevó a cabo la tramitación de la licitación de adjudicación de las obras de ejecución de las depuradoras de aguas residuales (EDARs) de los núcleos urbanos del entorno de la presa, con un presupuesto total de 7,2 millones de euros. Un proyecto que contempla la ejecución de las infraestructuras necesarias para dar solución a la depuración de los municipios de Regumiel de la Sierra, Canicosa de la Sierra, Quintanar de la Sierra, Vilviestre del Pinar y Monasterio de la Sierra, así como de la localidad de Castrovido perteneciente al municipio de Salas de los Infantes (Burgos).

De este modo, se proyectan sistemas de depuración consistentes en un proceso biológico mediante biodiscos para todas las localidades mencionadas, menos para Castrovido, ya que al tratarse de una pequeña población, la depuración se realizará mediante dos fosas sépticas. Se prevé que los trabajos se puedan iniciar en la primavera del próximo año 2025, tal y como apuntan desde la Confederación Hidrográfica del Duero.

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