Burgos ha censado a 580 ucranianos desde el estallido de la guerra

Cuando se cumplen dos años de la invasión rusa a Ucrania, Castilla y León ha superado las 4.300 protecciones temporales a refugiados desde la activación de este mecanismo de protección extraordinario, que de manera inmediata concede permiso de residencia y de trabajo a los ciudadanos desplazados por la guerra declarada por Rusia.

En Burgos son 580 los ciudadanos ucranianos censados durante los dos últimos años, 33 de ellos entre febrero de 2023 y enero de 2024. En el conjunto de Castilla y León, se han superado las 4.300 protecciones temporales a refugiados ucranianos desde la activación de este mecanismo de protección extraordinario, que de manera inmediata concede permiso de residencia y de trabajo a los ciudadanos desplazados por la invasión rusa. 

Concretamente y hasta el pasado 12 de febrero, la Oficina de Asilo y Refugio del Ministerio del Interior y la Policía Nacional ha tramitado y concedido un total de 4.322 protecciones en la comunidad. León y Valladolid son las provincias que han tramitado y concedido un mayor número de protecciones temporales, superando las 1.330 en su conjunto.

En la provincia de Burgos, estos ciudadanos llegados desde Ucrania a causa de la guerra no solo se encuentran en la capital, sino que se distribuyen en varias localidades. Todo ello gracias a la colaboración de asociaciones y de entidades locales, que han ofrecido vivienda y apoyo de todo tipo a las personas refugiadas.

Desde el inicio de la guerra, la provincia de Burgos se volcó para ayudar de múltiples formas a las personas que huían de la guerra. No solo con viajes solidarios que llegaron desde la capital hasta Polonia para traer a mujeres y a niños, sino también con la recogida y envío de material sanitario, ropa, medicamentos y otros enseres hasta la frontera de Ucrania.

Burgos fue punta de lanza en ofrecer ayuda y, al poco tiempo de recibir a los primeros ciudadanos ucranianos, un grupo de voluntarios creó una asociación para mediar entre instituciones y refugiados.

Un gran ejemplo de convivencia extendido a todas las provincias que el delegado del Gobierno en Castilla y León, Nicanor Sen, ha puesto en valor este sábado. Por ello ha remarcado el compromiso y la solidaridad del Gobierno con todos los refugiados que en estos dos años se han asentado en la comunidad, a la par que ha agradecido la colaboración de las entidades locales, las entidades sociales, con su voluntariado como pieza fundamental, y el conjunto de la sociedad castellana y leonesa con la atención de los refugiados ucranianos.

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