Burgos acoge en un mes a 80 migrantes derivados de la crisis en Canarias

Olga Aguilar, responsable de ACCEM Burgos, explica que los migrantes que han llegado a Burgos son todos hombres y proceden de Senegal, Gambia, Guinea Conakry y Burkina Faso. «Durante este mes de octubre hemos reforzado el sistema y los servicios, se han duplicado las plazas de acogida habituales de ACCEM en Burgos», confirma Aguilar. ACCEM trabaja en 13 comunidades autónomas y en Ceuta y Melilla.

En Canarias cuenta con tres centros con capacidad para 4.000 personas que, ahora mismo, necesitan de la solidaridad territorial. «Tenemos que dar cobertura a todos», remarca Aguilar, «ante el escenario de la Emergencia de Canarias, ACCEM reforzó sus recursos y sistemas a nivel nacional en el mes de agosto».

Las 80 personas que han llegado a la provincia de Burgos procedentes de Canarias y que huyeron de su país buscando refugio no lo han hecho en una tanda. Han llegado en grupos de unas veinte personas. La acogida en España es un sistema mixto, el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones coordina y las ONGs, como ACCEM dan la cobertura integral a estas personas.

La respuesta que ACCEM Burgos ofrece a las personas que llegan a la provincia es una respuesta interdisciplinar, no solo se encargan de que los migrantes tengan cubiertas sus necesidades básicas, como aseo, alimentación o alojamiento, también ofrecen atención psicológica, enseñan el idioma como herramienta fundamental de inclusión o asistencia jurídica. «Muchos de ellos pueden solicitar la condición de refugiado. Desde ACCEM Burgos se les ofrece toda la orientación que precisen para completar su proceso», asegura Aguilar.

La ayuda humanitaria es un proceso de tránsito, no es algo puntual y lo que se precisa depende de cada persona. Para muchos Burgos no era su destino, algunos quieren llegar a otros puntos de Europa u otros lugares de España porque tienen allí redes o familiares. La respuesta que se da es interdisciplinar y se ofrece por un equipo con múltiples perfiles. «Los tiempos de acogida varían en base a cada persona. Por protocolos sí hay unos tiempos, pero lo que se estima y se tiene en cuenta es el tiempo de cada persona. Muchas están de paso, otras precisan más tiempo. Hay protocolos, pero por encima de todo está dignidad de cada persona y la inclusión, ese es el objetivo», recalca Olga Aguilar.

La responsable de ACCEM Burgos evidencia que las 80 personas que han llegado a Burgos lo han hecho por diferentes causas, pero siempre es por «necesidad. No abandonas tu país, tu casa, tu familia por placer, llegan aquí por necesidad». La masiva llegada de personas a Canarias no se debe a un solo motivo, Aguilar explica que «actualmente vivimos una situación en la que en muchas partes del mundo se vive con gran convulsión por conflictos bélicos, políticos, por emergencias climáticas. Dictaduras, falta de libertad, persecuciones por orientación sexual», señala. Cada persona migrante lleva detrás un duro viaje y deja, más atrás, una situación tan crítica que lo ha hecho huir de su hogar.

El objetivo de ACCEM es la atención humanitaria y los derechos humanos. Esta no es la primera vez que Burgos colabora en la acogida de personas migrantes. «Hace 18 años, durante la crisis de los cayucos ya Burgos intervino y dio una respuesta ágil e inmediata. Un trabajo que ha continuado y ha sido así en los diferentes episodios sin precedentes en materia migratoria que hemos vivido», señala Aguilar.

Pero la misión de ACCEM Burgos, y a nivel nacional, no termina ahí. La asistencia humanitaria y el respeto por los derechos humanos no solo se ejerce de forma directa, de forma indirecta ACCEM reclama vías legales y seguras para erradicar el elevado número de fallecidos por este tipo de migración, al igual que lucha para evitar que las mafias se sigan enriqueciendo y aprovechando de este drama humano.