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La intención de instalar dos megaparques eólicos en la provincia de Burgos ha generado malestar entre los vecinos de las zonas afectadas, quer serían Montes de Oca, Juarros y la Demanda. Estos dos parques de aerogeneradores afectarían a una extensión de la provincia de ... Burgos que abarca desde el pantano de Uzquiza hasta Garoña.
A las alegaciones presentadas por los vecinos el pasado 30 de junio, se suma la oposición de la Asociación de Turismo Rural de la provincia de Burgos (Turalbur), entidad que también ha presentado alegaciones a los dos anteproyectos.
«Ante la proliferación sin excrúpulos de aerogeneradores en todo el territorio provincial, Turalbur ha presentado alegaciones a los parques que pretenden ubicarse en Las Merindades y en la comarca de Juarros», se comunica desde la asociación.
Los empresarios burgaleses de turismo rural consideran que «el impacto paisajístico y medioambiental, no justifica la instalación de un importante número de aerogeneradores». Por ello, se han dirigido a las autoridades pertinentes, solicitando la inmediata paralización del proyecto.
«La ubicación de estos complejos compromete seriamente el desarrollo de ambas comarcas. Una de ella, Las Merindades, especialmente azotada por la indiscriminada instalación de molinos», señalan desde Turalbur.
La asociación considera que no puede permanecer impasible «ante el tamaño de estos gigantes, que pueden medir más de 100 metros, mientras que sus aspas fácilmente superan la veintena. Su instalación genera un irreparable impacto acústico, lumínico, y visual, incluso ambiental, debido a la gran cantidad de aceites industriales que utilizan. Destruyendo, quizá para siempre, valiosos paisajes, recurso de primera magnitud en la atracción de visitantes», se argumenta desde Turalbur.
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La mayoría de los turistas optan, en la provincia de Burgos, por el atractivo histórico, artístico, gastronómico y sobre todo paisajístico. El turismo provincial, mayoritariamente, huye de los paisajes excesivamente humanizados, de las instalaciones industriales y de las alteraciones paisajísticas. «Los eólicos constituyen un destrozo de la belleza natural, no sólo por su tamaño, más altos que la Catedral de Burgos, sino sobre todo por su movimiento», apunta la asociación de turismo rural.
Por último Turalbur recuerda que la instalación de molinos «tampoco es positiva para la fauna de los territorios, otro de los recursos de la provincia, tanto por la caza, como por el todavía poco explotado, avistamiento de especies».
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