[AGOSTO] ¡Sonorámicos! ¡A sus puestos!

Agosto en la provincia de Burgos y en la comarca de Aranda de Duero es sinónimo de Sonorama. El festival que más proyección musical está dando en Europa a la villa arandina se ha especializado en batir récords, hasta tal extremo que la asistencia se aproxima ya a superar las cien mil personas y cada año se sirven más botellas de vino de la Ribera en las consumiciones. En la XI edición, 23.000, tres milmás que en 2017.

Agosto debería de ser el mes del Sonorama y de las múltiples actividades culturales que ofertan los municipios de la provincia. Sin embargo, el mes por excelencia del verano trajo consigo un nuevo y catastrófico siniestro en la N-1, que segó la vida de una joven pareja de gallegos de 22 y 26 años. Ocurrió el día 7 de agosto en el delicado paso de la carretera por la localidad de Quintanapalla. Pasaban las tres de la tarde cuando un camión con matrícula portuguesa, que circulaba sentido Burgos, invadía el carril contrario y se llevaba por delante a un turismo en el que viajbaan dos jóvenes. El vehículo quedó encajonado entre la cabina y el remolque y fue arrastrado hasta la cuneta sin dar opciones de escapatoria a sus ocupantes.

Sin duda, este fue el accidente mortal en la N-1 que más se recordó en este 2018 por lo fatídico y por el balance total de heridos, que ascendió a cuatro personas más. Además de la pareja pontevedresa, un padre y un hijo que circulaban tras el vehículo peor parado no pudieron evitar el impacto frontal con el convoy y acabaron en la cuneta. También resultó herido un motorista que se cayó al tratar de evitar al resto de vehículos siniestrados. El cuarto y último herido fue el propio camionero, que dio positivo en el posterior control de alcoholemia que le fue practicado por la Guardia Civil.

La gravedad del accidente movilizó a los bomberos de Burgos, dos ambulancias de soporte vital básico y un helicóptero medicalizado, así como a tres grúas para poder levantar el camión y liberar el amasijo de hierros en el que se había convertido el turismo de los jóvenes. Los sanitarios sólo pudieron confirmar el fallecimiento de los ocupantes del primer vehículo implicado y el resto, todos ellos varones de entre 18 y 58 años, fueron trasladados al Hospital Universitario de Burgos (HUBU).

Tras el doloroso accidente en Quintanapalla, la Plataforma de Afectados por la N-1 volvió a manifestarse en el punto en el que se produjo el siniestro para reclamar la liberalización inmediata de la AP-1. Centenares de personas dejaron de lado las vacaciones en pleno agosto y cortaron la vía para escenificar, una vez más, las cientos de muertes que se ha cobrado la N-1 como consecuencia del paso diario de miles de vehículos pesados.

Desde 1994 han fallecido más de 250 personas en accidentes de tráfico y ha habido miles de heridos.

A pesar del próximo plazo para el vencimiento de la concesión de la AP-1, los afectados por la N-1 reclamaron que se liberalizase una vía que consideran la llave para que ruleta rusa de la N-1 deje de girar. «Restan 109 días para este hecho sea una realidad y aún pueden pasar muchas cosas», advirtió durante la manifestación la cabeza visible de la lucha por la liberalización de la autopista AP-1, Rafael Solaguren. Sin embargo, no fue hasta el 1 de diciembre, tal y como figura en el contrato, cuando las barreras de la AP-1 desaparecieron y equilibraron el flujo de vehículos hacía el norte de la provincia.

Por suerte, el mes arrancaba con una noticia mucho más amable. El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación inauguraba un nuevo tramo del Camino Natural Santander-Mediterráneo para su uso como vía verde. Los 43,7 kilómetros comprendidos entre Castellanos de Bureba y Quintanilla Vivar atraviesan los términos municipales de Salas de Bureba, Poza de la Sal, Carcedo de Bureba, Merindad de Río Ubierna y Sotragero acercando a las poblaciones de sus localidades y fomentando una vida saludable.

Gracias a una inversión de 2,3 millones de euros, el nuevo e importante tramo se sumaba a los dos ya en servicio, uno entre el túnel de La Engaña y Santelices y otro entre Hontoria del Pinar y el límite de la provincia. Además, se trata de un corredor de gran interés que tiene el ambicioso objetivo de acabar uniendo Santander con el puerto de Sagunto, en un itinerario de unos 566 kilómetros, conectándose al mismo tiempo con otros caminos naturales ya en servicio, como el del Ebro.

Mientras, el Ayuntamiento de Burgos decidía aplazar el importante proyecto de ampliación del Palacio de Castilfalé para dotar de mayor espacio al Archivo Municipal. Cuando parecía que su ejecución estaba encarrillada, se produjo un insalvable contratiempo para el Consistorio: el Consejo de la Gerencia de Fomento acordó declarar nula la adjudicación del concurso de ideas y, con ella, el contrato suscrito con los ganadores, María Dolores Contell y Juan Miguel Martínez.

Los técnicos municipales abogaron por aceptar el recurso interpuesto por el impulsor de otro de los proyectos presentados al concurso de ideas. El recurrente consideraba que la adjudicación había incumplido el pliego de condiciones y lo denunció. Así, con escaso tiempo para acometer en la presente legislatura un nuevo proceso administrativo para seleccionar un proyecto de ampliación, el equipo de Gobierno decidió aplazarlo para el próximo mandato. Este objetivo fallido cayó como un jarro de agua fría tras el reciente paso en falso de la rehabilitación del Asador de Aranda como Centro Cidiano.

El que sí obtenía un rotundo éxito fue un burgalés que ganó el 10 de agosto un millón de euros en el sorteo Euromillones. El boleto sellado en la calle Jesús María Ordoño portaba los afortunados números 18, 20, 36, 43 y 44, mientras que las estrellas fueron el 9 y el 3 y dejaron a un nuevo millonario en Burgos.

Mientras alguien se hacía rico con el Euromillones, miles de almas disfrutaban en Aranda de Duero de la XXI edición del Sonorama Ribera, el festival musical por excelencia de la provincia. En esta ocasión, la gran estrella Liam Gallagher, cofundador de Oasis, fue el cabeza de cartel. Además del británico, Diego El Cigala, Izal o Bunbury, entre muchos otros, llenaron de música y buen rollo una localidad que acogió, del 8 al 12 de agosto a más de 100.000 sonorámicos.

La Plaza del Trigo volvió a acoger algunos de los momentos más especiales del festival, con los conciertos sorpresa en los que participó el grupo burgalés La Maravillosa Orquesta del Alcohol, que colapsó el centro de Aranda en su continua escalada hacia el éxito.

El otro gran beneficiado de esta experiencia musical fue el vino Denominación de Origen Ribera del Duero, que descorchó 23.000 botellas, 3.000 más que la XX edición. Además, un 25% de las bebidas que se consumieron en el festival eran vinos Ribera del Duero.

Por cosas mucho menos festivas fue noticia el Valle de Tobalina en este mes de agosto. Primero, porque un hombre de 45 años resultó herido tras saltar de la famosa cascada de Pedrosa de Tobalina y, segundo, por el millar de vecinos que se manifestaron contra el proyecto de construcción de una cantera. Pero vayamos por partes, el día 5 tuvo lugar un accidente en un foco turístico de la provincia durante el verano. Un hombre que saltó desde lo alto de la cascada se desestabilizó en el aire y acabó golpeándose contra una piedra. Por suerte, el accidentado mantuvo la consciencia y pudo ser rescatado con la ayuda de los bañistas y sanitarios, polémicas a parte por la actuación de los bomberos voluntarios del Parque de Medina de Pomar.

Además, el entorno fue noticia días más tarde, concretamente el 18, cuando un millar de vecinos protestaron por las calles de Valle de Tobalina para mostrar su oposición frontal al proyecto de construcción de una cantera de cemento en las proximidades de la localidad. Al grito de 'El Valle de Tobalina no se vende, se defiende', los vecinos expresaron su postura, después de que una empresa solicitara los permisos pertinentes para investigar la rentabilidad del yacimiento. Tras la central de Santa María de Garoña, el Valle de Tobalina y su entorno quieren desarrollarse económicamente con proyectos ambientalmente sostenibles, señaló la alcaldesa de la localidad, Raquel González.

También en la provincia tuvo lugar otro reseñable hecho, la XXIV edición de la Batalla de Atapuerca se celebraba con el sello de calidad tras ser declarada en 2017 Fiesta de Interés Turístico Regional. La cita, que recrea el histórico combate entre las tropas de Fernando I de Castilla y Sancho III de Navarra, crece cada año y con 200 actores voluntarios y cerca de 5.000 espectadores se celebró por primera vez con el reconocimiento de la Junta. Para celebrarlo, buena parte de los actores participaron en un pasacalle por la capital el viernes previo a la gran cita. De esta manera, los pocos burgaleses que no conocían lo que se recrea a solo unos kilómetros de la capital pudieron hacerlo.

Por otro lado, agosto fue noticia por la declaración de dos incendios casi consecutivos en el término municipal de Burgos, rompiendo la calma que venía disfrutando la provincia burgalesa durante todo el verano. El primero de ellos tuvo lugar en el Nudo Landa el día 27 y arrasó 7,5 hectáreas de monte que había sido reforestado hacía solo un año. El segundo, solo un día más tarde, se declaró en Villatoro y alcanzó las 30,9 hectáreas de destrucción, afectando especialmente a un entorno de arbolado con ejemplares plantados en 2012 y otros con medio siglo de vida, así como a una zona de rastrojo. En total, la factura de ambos fuegos se cobró la vida de 3.000 ejemplares y 38,4 hectáreas de terreno.

El golpe contra el cinturón verde de la ciudad calcinó 6,1 hectáreas de terreno en dos puntos muy distantes, aunque en días consecutivos, lo que llevó a varios políticos a poner el acento sobre el mantenimiento de esas zonas por parte del Ayuntamiento.

Y cuando parecía que el mes más veraniego se terminaría sin dejar más incidentes, el día 30, un tren de mercancías, cargado con bobinas de acero de la empresa ribereña Tubos Aranda, descarrilaba a su paso por Sarracín. El convoy se salió de la vía que une a Burgos con la capital de La Ribera y ocho de sus vagones acabaron sin rumbo.

El tren transportaba 28 bobinas de acero, con un peso cercano a las mil toneladas, desde Bilbao y hasta el Polígono Prado Marina. Por suerte, el accidente solo dejó daños materiales en la infraestructura ferroviaria. Si bien, los primeros cálculos hacían temer cuantiosos desperfectos en las vías, lo cierto es que, en solo cinco días, el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) logró restablecer la circulación ferroviaria.

La guinda de agosto, en positivo, la puso la Policía Nacional, que anunciaba el día 31 que habían sido detenidas siete personas de origen georgiano relacionadas con el robo en viviendas. Divididos en dos células, los delincuentes aprovechaban la ausencia de los propietarios, tras comprobar que se encontraban de vacaciones, para entrar en domicilios de la capital y hacerse con todo tipo de objetos de valor.

Los detenidos señalaban las puertas de las viviendas que pensaban que podían encontrarse vacías y esperaban a que el testigo, a base de pegamento, corroborase que no había actividad. En ese caso, entraban en el domicilio sin dejar muestras de que la cerradura hubiera sido forzada.

La magnitud de esta acción policial permitió esclarecer, al menos 14 robos y otra decena de intentos, así como que muchos burgaleses recuperasen el sueño tras la alerta social que llegó a crearse.

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