Secciones
Servicios
Destacamos
Una amiga mía coincide a veces desayunando en un bar de su barrio con Viggo Mortensen. Dice mi amiga que parece un albañil rumano, no una estrella. Con todos los respetos a las estrellas. Dice él que lo que se ha hecho con los ancianos ... durante la pandemia (en Madrid, en Cataluña, en Estados Unidos, pero especialmente en Madrid) «se parece a lo que hacían los nazis. Una fila aquí, otra ahí». Quizá en el futuro sepamos qué ha pasado en estos tiempos de caos (aunque muchas torpezas rayanas con la maldad nos las hayan contado, las hayamos vivido o las intuyamos, incluido lo de no poderse despedir de quien iba a morir). Lo que sí sabemos con bastante aproximación es lo que hicieron los nazis. Valiente comparación. Si los historiadores hispanistas me suelen tocar bastante las narices (salvo Bartolomé Bennassar y algún otro), con los pianistas y actores hispanistas me echo mano a la recortada que no llevo.
Ya sé que me repito mucho, pero pasarán años hasta que sepamos qué ha pasado. Cómo vamos a saber los españoles la cifra de muertos por covid, por ejemplo, si Pedro Sánchez ni le dice a Pablo Iglesias, que está en su Gobierno, lo de la fusión entre Caixabank y Bankia. «Era una información muy sensible», justificó ayer el presidente.
Me recordó a esa señora sevillana de 'Españoles por el mundo' que vivía en Alaska y estaba casada con un militar. A él le preguntaban por su trabajo. «No sé cómo se dice top secret». «Cosas mu secretas», apuntaba ella. A Pedro Sánchez le ha faltado decir que las «cosas mu secretas» no se las cuenta al señor de Podemos que ve series, faltaría más. No se fía de su vicepresidente se va a fiar de los españoles, que a saber qué haríamos con transparencia.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.