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La primera sesión de control al Gobierno en el Congreso ha sido la segunda parte del pleno de ayer en el Senado. El jefe del Ejecutivo ha reprochado al PP un «no absoluto» a la negociación presupuestaria y a la renovación institucional y ha reclamado ... una rectificación de rumbo. Pedro Sánchez ha descartado, además, como válido el argumento de que las tesis de Pablo Iglesias, que conllevan cambios en la Carta Magna, complican a los populares la participación en un acuerdo sobre el Consejo General del Poder Judicial. «Hay una diferencia entre Unidas Podemos y ustedes, y es que Unidas Podemos cumple con la Constitución y ustedes no cumplen con la Constitución», ha espetado a Pablo Casado.
Hace días que el presidente del Gobierno aprieta al PP para que «renueve las instituciones, abandone el bloqueo y arrime el hombro». Desde la Moncloa se busca poner de manifiesto que los populares se han desmarcado. Este martes en el Senado, Sánchez elevó el tono e incluso atribuyó al principal partido de la oposición un comportamiento desleal con la Carta Magna por la resistencia en este momento a actualizar el CGPJ. «El PP ha decidido no hacer nada», ha vuelto a censurar esta mañana.
Pablo Casado, mientras tanto, ha insistido en su propuesta para «despolitizar» el órgano de gobierno de los jueces. «Pero usted prefiere entregárselo a un partido imputado que arremete contra el Rey y contra la justicia», ha replicado en referencia a Unidas Podemos.
Ya a principios de año el PP mostraba sus reticencias a renovar con el PSOE el CGPJ. Entonces, la formación conservadora hablaba de pérdida de confianza tras el nombramiento de la exministra de Justicia Dolores Delgado como fiscal general. Este verano, los contactos se retomaron. En la dirección de Casado, sin embargo, aseguran que las críticas de Iglesias a Juan Carlos I por su salida de España y el consecuente cuestionamiento de la monarquía impiden que la negociación continúe.
«Usted lo que exige -ha respondido el presidente del PP a Sánchez- es nuestra rendición incondicional, y no para gobernar mejor, sino para seguir haciéndolo mal, pero impunemente, sin oposición ni alternativa». La intervención de Casado perseguía, en realidad, poner el foco en la gestión de la pandemia.
El líder del PP ha exigido a Sánchez la asunción de responsabilidades por haber «mentido masivamente a los españoles» sobre la epidemia a comienzos de verano, cuando animó a salir a la calle aun sin bajar la guardia ante los rebrotes. «Se fue a tomar el sol a Lanzarote y a Doñana, pero la realidad que usted ocultaba es que el coronavirus sigue matando», ha zanjado.
El presidente del Gobierno ha respondido con el mismo mensaje de «unidad» que reitera estos días. «Ahora que pide disculpas al señor Iglesias cuando le regaña -ha añadido Casado-, hágalo también al resto de españoles, incluso a nosotros, y deje de atacarnos, porque llevamos seis meses tendiendo la mano».
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