El PP votará en contra del decreto energético si el Gobierno no retira las «frivolidades»

Por «medidas frívolas» la dirección del PP entiende básicamente la limitación a 27º del aire acondicionado en locales comerciales y el apagado de escaparates a partir de las 22.00 horas, que incluye el real decreto que el Ejecutivo aprobó el pasado 1 de agosto para cumplir con el compromiso alcanzado con Bruselas para reducir un 7% el consumo de gas en España. Iniciativas, en todo caso, recuerdan en la Moncloa, que cuentan con el reconocimiento de la presidenta de la Comisión Europea, la conservadora Ursula von der Leyen. «Le pedimos al PP que se comporte como un partido serio y responsable, y asuma las palabras de Von der Leyen que ha hecho un llamamiento a la unidad y solidaridad de las que España va a hacer gala», afirmó la ministra de Educación, Pilar Alegría.

Los populares creen que el Ejecutivo aún está a tiempo de enmendar sus errores y rectificar el decreto ley en el Consejo de Ministros de hoy para que se garantice «el empleo en la industria», en crisis por la subida de la energía, y se recojan «medidas para la protección del transporte por carretera». «Les pido que se relean el documento del PP, que incluyan algunas de nuestras medidas y tendrán nuestro voto favorable», aseveró Bendodo, que propuso igualmente alargar la vida de las centrales nucleares y optar por el biogas y por el hidrógeno verde.

Abandonar el «negacionismo»

El Gobierno, sin embargo, no contempla dar marcha atrás y recuerda al primer partido de la oposición que el decreto energético lleva semanas publicado en el Boletín Oficial del Estado, por lo que no cabrían modificaciones de aquí al jueves. Instan, además, al PP y a su líder Alberto Núñez Feijóo a abandonar el negacionismo y apostar por la «unidad europea». «Estamos ante una guerra que está alterando la política energética en el mundo y donde la UE está mostrando la fortaleza de ir en la dirección adecuada, la de combatir a Putin todos unidos, también desde la política energética», dijo la portavoz gubernamental Isabel Rodríguez.

En Génova reconocen, de puertas hacia dentro, que no esperan que sus demandas sean escuchadas ni que el Gobierno descuelgue el teléfono. Censuran, además, que en Moncloa estén tan obsesionados con Feijóo y se dedican a «insultarle» porque sabe que Sánchez va a salir tras las generales. «Está a un paso de crear el ministerio 23 para atacar a Feijóo», ironizó Bendodo.