Secciones
Servicios
Destacamos
No habrá decisiones precipitadas que afecten a la frágil dirección de los socialistas madrileños. Al menos, no las hubo este miércoles. A pesar de que algunas voces críticas lo pedían, el aún secretario general de la federación, José Manuel Franco, rehusó dimitir en la ... reunión convocada para analizar los resultados electorales y defendió la necesidad de tomar medidas «drásticas pero sosegadas», lo que implicaría su continuidad al frente del partido hasta el congreso de otoño. Sin embargo, Pedro Sánchez sí moverá ficha en otros lares.
La ejecutiva federal convocará este jueves, si no lo hace antes la dirección del PSOE de Andalucía, las primarias para elegir cabeza de cartel para las próximas autonómicas. La decisión adelanta la batalla definitiva contra Susana Díaz, a la que Ferraz tomó la decisión de intentar descabalgar hace ya varios meses.
El presidente andaluz, Juanma Moreno, volvió a asegurar este miércoles que no tiene ninguna intención de anticipar los comicios y fuentes de la dirección socialista admiten que su temor de que lo que haga es, en realidad, escaso. Pero la victoria de Isabel Díaz Ayuso ha propiciado el marco para justificar un movimiento largamente meditado, con la excusa evitar una improvisación que les reste opciones de victoria, como ha ocurrido en Madrid.
En el entorno de Susana Díaz recibieron con enorme malestar la decisión, que atribuyen a un intento de Sánchez de tapar su fracaso frente a Isabel Díaz Ayuso.
Después de muchas dudas y de resistirse a la presión de los críticos andaluces, Sánchez accedió poco antes de las pasadas Navidades a poner en marcha una operación para derribar a la antaño todopoderosa expresidenta autonómica, su rival en las fratricidas primarias de 2017 para la secretaría general del PSOE.
Díaz, que pese a haber ganado los últimos comicios se vio desalojada de la Junta por una coalición entre el PP y Ciudadanos apoyada por Vox, ha perdido mucho poder interno. Los críticos aseguran que, aunque todavía controla algunos aparatos provinciales, su fuerza entre las bases es menguante. «La pulsión de cambio en la militancia es grande, superior incluso que el que se percibe en las estructuras del partido», dice uno de sus antiguos colaboradores.
Aun así, la dirigente socialista no está dispuesta a dar su brazo a torcer sin plantar batalla. No en vano, ha rechazado todas las ofertas realizadas desde Ferraz en un intento de apartarla. El elegido para competir con ella por la candidatura a la presidencia es el alcalde de Sevilla, Juan Espadas.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
La proteína clave para la pérdida de grasa
El Comercio
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.