Revés para Puigdemont: JxCat pierde los derechos electorales en detrimento del PDeCAT

Junts parte, por tanto, en desventaja en la pugna electoral del próximo 14 de febrero, ya que concurrirá sin saber si podrá participar en los debates televisivos, sin presencia en los bloques de publicidad gratuitos establecidos en los medios públicos y sin la asignación económica en función de su representación parlamentaria.

Los derechos electorales de la coalición de JxCat, que tiene 34 diputados en el Parlament, pasan al PDeCAT. Ambas formaciones intentaron la integración para concurrir juntas, pero Puigdemont puso unas condiciones imposibles y los dos partidos se han separado. La escisión tiene ahora consecuencias para Laura Borràs y Carles Puigdemont. JxCat nació como marca electoral y como una «fórmula de dos almas: un partido -el PDeCAT-y un conjunto de independientes que se añadieron», según la formación nacionalista impulsada por Mas, por lo que los derechos electorales de esta coalición corresponden al PDeCAT, según ha resuelto la Junta Electoral.

Estos derechos electorales tienen que ver con cuestiones económicas, pero también con la presencia en la mesa de partidos sobre las elecciones que convocará el conseller Bernat Solé el próximo 15 de enero para decidir si se aplazan o no, la incidencia en la cobertura de los medios de comunicación públicos y también, por ejemplo, el reparto de la presencia en espacios de propaganda electoral de todo tipo. Está por ver cuál es la reacción de Junts y si sus dirigentes podrán o no participar en los debates de campaña. Junts tiene que partir de cero y hasta se ha visto obligada a reunir un mínimo de 5.000 avales para poder presentarse.

No son, en cualquier caso, todo reveses para la formación de Carles Puigdemont. Un sondeo de Electomanía, a un mes de las elecciones, ha dado por primera vez una ligera ventaja a los postconvergentes respecto a ERC en la lucha por la victoria. Según esta encuesta, JxCat obtendría 34 diputados, ERC se alzaría con 33 y el PSC, en tercer lugar, ascendería a 28. La suma de JxCat y ERC daría 67 escaños, por lo que estarían a uno de la mayoría absoluta. Con los cinco que podría sacar la CUP ya tendrían suficiente y superarían los 70 que tienen entre las tres formaciones secesionistas en la actualidad. El sondeo no prevé que el PDeCAT obtenga representación, pero el independentismo podría estar cerca de superar el 50% de los votos registrados.

En la pugna por la victoria entre JxCat y ERC, ambos partidos han chocado esta mañana en relación a la mesa de diálogo puesta en marcha entre el Gobierno central y el catalán para tratar de buscar una salida a la cuestión catalana. Laura Borràs ha asegurado que la mesa está «enterrada». Ha sido «un reportaje fotográfico y un paseo por el jardín», «no se ha avanzado en la represión y el diálogo», según la dirigente nacionalista. Marta Vilalta, de Esquerra, le ha replicado que la mesa del diálogo «no está muerta, ni ha quedado enterrada». «Si la candidata de JxCat quiere renunciar a hacer política, quiere renunciar a la palabra o quiere renunciar a poder sentarse y solucionar el conflicto político, que lo haga, nosotros no renunciaremos a nada», ha declarado la republicana.