El PSC retiene la Diputación de Barcelona gracias a los comunes y dos díscolos de Junts

Hasta la fecha, gobernaban juntos la institución provincial de Barcelona el PSC, como primera fuerza, y Junts. Todo apuntaba a que ambos partidos reeditarían la coalición, pero los de Puigdemont rompieron con los socialistas, tras la operación Collboni, que dejó a Xavier Trias sin la alcaldía de Barcelona. El PSC recuperó el bastón de mando en la capital catalana, como consecuencia de un pacto con los comunes y el PP. Junts se sintió traicionado por los socialistas e intentó devolverles la jugada en la Diputación, buscando una alianza con ERC.

Pero los independentistas no han sido capaces de armar una mayoría alternativa (al final ni siquiera han votado igual), con el agravante, para Junts, que dos de sus diputados provinciales se han salido del grupo para pactar con el PSC. Los dos alcaldes díscolos están vinculados al PDeCAT. Para las municipales, Junts y el PDeCAT llegaron a acuerdos para concurrir juntos. Pero en cambio, en las generales van por separado. Junts está en crisis.

Tras salir del Govern, por discrepancias con Pere Aragonès por su apuesta por la mesa de diálogo y por dar estabilidad al Gobierno de Sánchez, los postconvergentes perdieron la alcaldía de Barcelona, ahora quedan fuera de la Diputación de Barcelona y además se rompe el grupo parlamentario provincial. Mantienen, eso sí, la Diputación de Girona (las de Tarragona y Lleida estarán en manos de ERC, gracias al PSC). Junts pierde presencia institucional, mientras insiste en su estrategia de bloqueo en Madrid. El sector pragmático amaga con reclamar un congreso extraordinario.