El presidente del CGPJ frena el pleno de los conservadores para responder a Sánchez

La negativa de Mozo se centra en el incumplimiento por parte de los solicitantes de varios criterios procedimentales aprobados por el propio Consejo en septiembre para la renovación de la corte de garantías. Asimismo, desactiva el intento de estos consejeros conservadores de adelantarse a la entrada en vigor de la reforma legal que impulsan el PSOE y Unidas Podemos en las Cortes Generales para agilizar los citados nombramientos, que están pendientes desde junio pasado y siguen bloqueados precisamente por la posición frentista de este bloque mayoritario en el CGPJ.

En un comunicado conocido este martes por la tarde, el presidente Rafael Mozo, representante del sector progresista, responde a la petición con carácter urgente de la convocatoria de un pleno extraordinario reclamada el pasado viernes por los vocales Nuria Díaz, José Antonio Ballestero, Carmen Llombart, Juan Martínez Moya, Juan Manuel Fernández Martínez, José María Macías, Gerardo Martínez Tristán, María Ángeles Carmona y Wenceslao Olea. La solicitud incluía un único punto del orden del día: nombramiento de magistrados del Tribunal Constitucional.

La petición así formulada, responde ahora Mozo, «no puede ser atendida en aplicación del artículo 35, párrafo segundo del Reglamento 1/1986 de Organización y Funcionamiento del CGPJ, que exige la aportación de todos los documentos, si los hubiere, relacionados con el orden del día del pleno cuando se solicite la celebración de una sesión extraordinaria, así como en cumplimiento de las reglas de procedimiento tercera y quinta, aprobadas en el pleno extraordinario de 8 de septiembre de 2022».

Dichas normas especifican que la convocatoria del pleno tendrá lugar cuando lo acuerde el presidente por propia iniciativa o lo soliciten al menos cinco vocales, y en esa solicitud se incluirán los nombres de dos candidatos/as al TC. Además, esta propuesta se acompañará del currículo de los candidatos. Es decir, Mozo viene a decirles a sus colegas conservadores que si quieren un cónclave para votar ya a los magistrados propuestos a la corte de garantías antes deben dar un nombre, algo que no ha ocurrido todavía y que está en el fondo del bloqueo que ha llevado a los partidos del Gobierno a intervenir mediante una reforma legal.

Tras esta negativa de Mozo, lo razonable es que sea en el pleno ordinario del próximo 22 de diciembre, convocado con anterioridad, cuando se voten a los candidatos propuestos. Sin embargo, se da por hecho que no habrá acuerdo porque con la ley actual se requiere una mayoría cualificada de tres quintos (11 de los 18 votos en liza) para aprobar a los candidatos y ninguno de los dos bloques la alcanza en la actualidad.

Precisamente, la iniciativa que se tramita en el Congreso quiere modificar los requisitos de la votación para renovar ya el TC y lograr el cambio de mayorías que anhela el Ejecutivo. Una medida que los vocales conservadores catalogaron como un «atropello» y un «asalto a las instituciones» por el cambio de las reglas del juego en plena negociación con el sector progresista, que ya ha designado a su candidato: el magistrado del Tribunal Supremo José Manuel Bandrés, al que algunos conservadores no ven con buenos ojos por su cercanía el Ejecutivo.