La preocupación por Cataluña se desinfla

El barómetro mensual del CIS octubre pasado registró que el 29% decía que la independencia de Cataluña era el principal problema de España. Solo le superaba en la escala de inquietudes el desempleo. El 27 de octubre, el Parlamento de Cataluña con el único voto de las fuerzas secesionistas aprobó una declaración de independencia. Ese mismo día el Senado autorizó al presidente del Gobierno a aplicar el artículo 155 de la Constitución en ese territorio y Mariano Rajoy destituyó a todo el Gobierno de la Generalitat, disolvió el Parlament y convocó elecciones el 21 de diciembre.

Una actuación que en el estudio de noviembre tuvo su reflejo en una caída de la preocupación por la segregación. El 24,6% dijo entonces que era uno de los principales problemas de España, un retroceso de más de cuatro puntos.

El último sondeo del CIS, cuyo trabajo de campo fue elaborado entre el 1 y 10 de diciembre, antes de las elecciones del 21 de diciembre, comprueba que la preocupación por Cataluña es citada por el 16,7% de los encuestados, más de 12 puntos de caída respecto a octubre.