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Vox ha vuelto a la carga con una de sus grandes exigencias en los últimos años: el llamamiento al Gobierno para restituir en sus cargos a los agentes del CNI en Cataluña y el País Vasco. Lo ha hecho aprovechando la polémica en torno a ... Mohamed Said Badaoui, conocido como 'el imán de Reus', que fue detenido la pasada semana por «suponer una amenaza para la seguridad nacional».
El portavoz de la formación derechista en el Congreso, Iván Espinosa de los Monteros, ha pedido dotar al CNI de medios materiales y humanos necesarios para garantizar la integridad de los agentes y suficiencia de medios para luchar contra el terrorismo y la inmigración ilegal.
Según el dirigente de Vox, es «vergonzoso» el apoyo que, según él, ha recibido Said Badaoui por una parte de la política catalana. Por ello ha exigido que se ejecute de forma inmediata su orden de expulsión.
Vox ha dejado claro que quiere que España expulse del país a cualquier extranjero que, «con la cobertura de actos de culto, oración, formación o predicación en mezquitas musulmanas radicales», realice actos que induzcan al odio «contra Occidente, contra el Cristianismo, contra las mujeres, contra las tradiciones y las costumbres españolas».
Los de Santiago Abascal han llevado a cabo esta petición -la de pedir que los agentes del CNI vuelvan a Cataluña y el País Vasco- aprovechando una iniciativa parlamentaria en la que pedía la expulsión de Badaoui. Y lo hace porque Defensa ha retirado en los últimos meses a los agentes desplegados en dichos territorios de forma notable.
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