El llenazo del grupo socialista desata una avalancha de críticas

Edmundo Bal se ha quejado a la presidenta del Congreso por la presencia masiva de los diputados socialistas mientras el resto de grupos cumplía con la cuota del 50%. Meritxell Batet ha respondido que en ninguna parte del reglamento se recoge que los parlamentarios no puedan asistir a los plenos de la Cámara. Ha exigido, eso sí, que como no se podía respetar la distancia de seguridad de dos metros entre las personas todos llevaran puesta la mascarilla durante todo el debate.

Los 120 diputados del PSOE y algún senador se han sentado apiñados en los escaños, y han recibido con una larga ovación al presidente del Gobierno. Como hicieron el pasado 21 de julio los ministros en la Moncloa. «Sánchez necesita muchos aplausos», ha escrito el PP en su cuenta de Twitter. Santiago Abascal se ha quejado de la falta de «decoro» del PSOE al llenar su bancada en plena expansión de los rebrotes de la Covid-19. Solo buscan «atronar con aplausos al presidente del Gobierno«, ha terciado Bal.

El grupo socialista se ha justificado porque habían informado «en tiempo y forma» a la presidenta del Congreso de que iban a asistir todos sus representantes.