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Puigdemont participó el pasado jueves por videoconferencia en un acto conemorativo del referéndum ilegal del 1-O. EFE

JxCat aguarda un gesto de Puigdemont para elegir el contrincante de Aragonès

Laura Borràs, Damià Calvet y Jordi Puigneró aspiran a la liderar la lista de la formación independentista, que este domingo concluye su fundación

cristian reino

Barcelona

Sábado, 3 de octubre 2020, 20:05

El presidente del Parlamento catalán, Roger Torrent, ya ha anunciado la fecha de las elecciones autonómicas, el 14 de febrero de 2021, y sin embargo JxCat lo tiene aún todo por hacer. Ni tiene candidato ni ha acabado de resolver sus cuitas internas sobre ... si rompe o no definitivamente con su pasado convergente y se independiza del PDeCAT, el partido de Artur Mas. En este sentido, en ERC llevan ventaja. El candidato, según la elección de Oriol Junqueras, es Pere Aragonès, que tiene cuatro meses como presidente interino para convencer al electorado de que puede ser el próximo jefe del Ejecutivo catalán.

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La formación de Puigdemont concluye este domingo un largo proceso de fundación. La militancia votó este sábado la estructura organizativa del partido y su corpus ideológico, en el que apuesta por un independentismo unilateralista y por la confrontación con el Estado. La receta es seguir con el 'procés'. Todas las miradas en el partido están puestas en Carles Puigdemont, líder absoluto. De él depende la confección de las listas y la elección de los candidatos. Primero tiene que decidir si se presenta. El expresidente de la Generalitat es el principal activo electoral de JxCat. Nadie tiene su tirón. En las dos últimas ocasiones en que ha liderado las listas (las catalanas del 21-D de 2017 y en las europeas) derrotó contra pronóstico a Junqueras. Puigdemont mantiene la puerta abierta a presentarse. «Hoy no puedo tomar esta decisión», dijo este sábado en elnacional.cat. «No puedo hacer planes más allá de una semana, sin saber qué pasará con el suplicatorio» para su extradición, señaló.

Dirigentes relevantes como Elsa Artadi le presionan para que se presente. En cualquier caso, si lidera las listas y gana las elecciones, no podrá ser investido, como ya ocurrió en las pasadas autonómicas. Aseguró que si ganaba volvería, pero esta vez ya no puede repetir una promesa que se ha demostrado inviable. JxCat, por tanto, necesita elegir al que sería el candidato efectivo, con posibilidades de someterse a una sesión de investidura, como en su día fue Quim Torra.

Primarias en el horizonte

Está por ver si se acaban celebrando primarias o Puigdemont diseña su propio equipo y cierra la competencia interna, pero algunos dirigentes ya se han dejado querer en los últimos tiempos. Quienes ya se han postulado abiertamente son la portavoz de JxCat en el Congreso, Laura Borràs, y el consejero de Territorio, Damià Calvet. La primera es la favorita de Torra y de los sectores de JxCat que no proceden de Convergència. Tiene carisma en el independentismo, pero una gran losa en el Supremo, donde se la investiga por haber adjudicado presuntamente a dedo contratos a un amigo mientas dirigía el Instituto de las Letras Catalanas. Los llamados «trapis» de Borràs, con los que ERC se frota las manos, si bien en JxCat tratan de dar la vuelta a la tortilla afirmando que se trata de un caso de persecución política y que la causa penal es una invención de las cloacas del Estado. Fue consejera de Cultura.

Calvet rompió recientemente su carné del PDeCAT, como han hecho buena parte de los dirigentes de la antigua Convergència que han impulsado JxCat, como el propio Puigdemont, Josep Rull, Jordi Turull, Miquel Buch o Joaquim Forn. Calvet cuenta con el aval de Rull y Turull. Lleva en la administración catalana, como alto cargo del área de las Infraestructuras desde 2010, el año en que Convergència recuperó el poder tras siete años de tripartito.

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JxCat se mantiene en la vía unilateral y la confrontación con el Estado para alcanzar la independencia

El tercero en discordia es Jordi Puigneró, actual consejero de Políticas Digitales. Es el que gusta a Puigdemont y el que provoca menos fricciones entre los diferentes sectores de JxCat. Experto en telecomunicaciones, fue uno de los cerebros del diseño tecnológico del referéndum ilegal del 1-O. Estuvo imputado por los preparativos de la votación. Empezó como concejal de CDC en el Ayuntamiento de Sant Cugat en 2005. Es uno de los dirigentes secesionistas que avala las tesis del pseudohistoriador Jordi Bilbeny, que defiende la catalanidad de Colón y otras figuras relevantes de la historia.

Han sonado también Elsa Artadi, pero su intención es dar la batalla por la alcaldía de Barcelona, o el presidente de la Cámara de Comercio de Barcelona, Joan Canadell, aupado por la ANC. También los dos consejeros que más peso han ganado tras la inhabilitación de Torra, el exeurodiputado Ramón Tremosa y Meritxell Budó.

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Disturbios en Barcelona el pasado jueves. REUTERS

El juez deja en libertad con cargos a 11 detenidos por el 1-O

Las once personas que aún permanecían en dependencias de los Mossos d'Esquadra por los disturbios del pasado jueves en Barcelona quedaron este sábado en libertad con cargos, tras comparecer ante el juzgado de guardia. Fueron detenidos en las protestas por la conmemoración del tercer aniversario del referéndum ilegal del 1-O.

El magistrado acordó, de acuerdo a la petición de la Fiscalía, libertad provisional, prohibición de salida del territorio, retirada de pasaporte y presentaciones periódicas cada 15 días en el juzgado para todos los arrestados. Estos activistas de los CDR tienen abierta una causa judicial por desórdenes públicos y atentado a la autoridad.

En total, fueron detenidas 18 personas en Barcelona y dos en Girona, en una jornada que trataba de recrear las batallas campales de hace un año pero se quedó muy lejos. Los disturbios regresaron a las calles catalanas un año después de las algaradas del año pasado, que se prolongaron durante un mes para protestar contra la sentencia del Tribunal Supremo contra los líderes del 'procés'. El fuego, las barricadas y los contenedores en llamas han vuelto esta semana al centro de la ciudad condal, pero las protestas fueron muy reducidas en comparación a las de hace un año. Mucha menos gente y apenas enfrentamientos con los Mossos d'Esquadra, que emplearon la técnica del carrusel con sus furgonetas para dispersar a los manifestantes. El lunes pasado, tras la sentencia de inhabilitación contra Quim Torra apenas se registraron incidentes.

Este sábado también hubo protestas independentistas en Cataluña, en esta ocasión para recordar y reivindicar la huelga del 3-O de 2017, en la que el soberanismo se echó a la calle contra las cargas policiales del 1-O y contra el discurso del Rey. Una plataforma secesionista rodeó el TSJC para denunciar que la «represión continúa», si bien no eran ni un centenar los congregados. Oriol Junqueras reivindicó este sábado el 3-O proponiendo a las fuerzas secesionistas un «3 de octubre permanente».

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