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El contagio de la titular de Igualdad, Irene Montero, trastocó este jueves la agenda política y tuvo un impacto directo tanto en el Gobierno como en la Zarzuela y el Congreso. Los Reyes y los miembros del Ejecutivo se sometieron de inmediato a pruebas diagnósticas, ... la actividad de Pedro Sánchez quedó sujeta a mecanismos telemáticos y, en la Cámara baja, la comparecencia del responsable de Sanidad, Salvador Illa, se suspendió por prevención. A última hora se supo que, de los ministros, sólo la de Política Territorial, Carolina Darias, había dado también positivo por coronavirus.
El comunicado de la Moncloa en el que se anunciaba por la mañana cuál era la situación de Montero, en «buen estado» pese al contagio, derivó en una cadena de controles y cambios de planes. El Gobierno trasladó que el vicepresidente Pablo Iglesias, pareja de la titular de Igualdad, permanecerá en cuarentena, aun no estando afectado, y quedaron reforzadas las medidas para minimizar riesgos.
Ayer noté síntomas. Me han hecho la prueba del COVID-19 y he dado positivo. Voy a permanecer en casa con mi familia y desarrollando mi trabajo por medios telemáticos hasta que lo indiquen las autoridades sanitarias. Me encuentro bien.
Irene Montero (@IreneMontero) March 12, 2020
El Consejo de Ministros se celebró de manera presencial con los responsables de los departamentos implicados en la gestión de la crisis del coronavirus. Prácticamente, todos. Pero la comparecencia pública tras el encuentro dejó una imagen inusual: la de Sánchez respondiendo en una sala sin periodistas. Las preguntas se habían enviado previamente a través de un grupo de Whatsapp habilitado por la Secretaría de Estado de Comunicación. Y ese fue el sistema que empleó horas después el líder del PP, Pablo Casado, para su rueda de prensa.
Tampoco la cita prevista para las seis de la tarde de Sánchez con los agentes sociales fue presencial. «A partir de este momento -informaron fuentes de la Moncloa- las reuniones en la agenda del presidente se realizarán de manera telemática». Del mismo modo, el desplazamiento de la ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, a Estados Unidos, programado para el 16 y 17 de marzo, quedó suspendido.
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Mientras tanto, en el Palacio de la Zarzuela, y puesto que doña Letizia acudió el viernes junto a Irene Montero a una reunión de trabajo de la Asociación para la Prevención, Reinserción y Atención de la Mujer Prostituida, los Reyes se sometieron al test de COVID-19 -al cierre de esta edición se desconocía el resultado-. También su agenda se ha visto alterada estos días por la progresión de la epidemia, y este jueves, además, la audiencia de Felipe VI con la secretaria general del Consejo de Europa, Marija Pejcinovic, quedó aplazada por cancelación del viaje de la responsable europea.
Más allá de lo institucional, prácticamente todos los partidos han restringido su actividad y los diputados de Vox permanecen en aislamiento voluntario desde que Javier Ortega Smith dio el martes positivo en la prueba. El presidente de la formación, Santiago Abascal, y la secretaria general del grupo en el Congreso comunicaron anoche que también están contagiados.
Este martes, al conocer el positivo de Javier Ortega, me puse en cuarentena y pedí a un laboratorio privado un test de Covid-19. La prueba también ha dado positivo así que seguiré trabajando desde casa. Gracias por vuestra preocupación aunque me encuentro razonablemente bien.
Santiago Abascal (@Santi_ABASCAL) March 12, 2020
No es el caso del líder del PP, que confirmó este jueves su negativo. En sus filas se han conocido dos contagios, el de la senadora Carmen Leyte y el de Ana Pastor. Precisamente, la exministra de Sanidad exhortó en la Cadena Cope a la ciudadanía, a seguir las recomendaciones. «Que somos bastante dados -añadió- a hacer cada uno lo que nos parece».
La vida parlamentaria entra en suspenso. El Congreso decidió este jueves cancelar su actividad de los próximos 15 días una vez conocidos los contagios por coronavirus de, al menos, la ministra de Igualdad, Irene Montero, la expresidenta de la Cámara, Ana Pastor, y los diputados de Vox Javier Ortega Smith y Carlos Zambrano. En la agenda únicamente figura el pleno del próximo 24 de marzo, una cita destinada a aprobar dos decretos leyes, cuyo plazo está a a punto de vencer. La sesión, sin embargo, no reunirá a los 350 integrantes del hemiciclo, sino que de manera inédita la votación será telemática y sólo estarán obligados a asistir aquellos portavoces que vayan a intervenir en el debate.
La propagación del virus ha obligado también a las Cortes a tomar decisiones excepcionales para tratar de contener o ralentizar el avance de la epidemia. El positivo de Ortega Smith en la prueba del COVID-19 y el aislamiento voluntario del grupo de Vox al completo ya llevó el martes a la Cámara baja a aplazar el pleno de esta semana. Ahora la prórroga de la suspensión atiende, no tanto a una cuestión de «legitimidad democrática» por la ausencia de un grupo político, como a las «indicaciones de las autoridades sanitarias». De hecho, todo el personal de las instalaciones entra en servicios mínimos.
Lo urgente
Desde este jueves, y hasta nueva orden, el día a día del Congreso se reduce a lo imprescindible y deja de ser presencial. La Junta de Portavoces volverá a reunirse la semana que viene, pero lo hará por vías telemáticas, y el registro seguirá ese mismo modelo. Si surgiese la necesidad de una tramitación urgente, podría incluirse en el orden del día del pleno de finales de mes.
Siendo así, la presidenta de la Cámara, Meritxell Batet, quiso defender que la institución «no se cierra». Además, los portavoces estudiarán la próxima semana fórmulas para trabajar aun en circunstancias como estas. Por ejemplo, se verá la opción de celebrar reuniones por videoconferencia.
El PP, sin embargo, trasladó este jueves sus objeciones sobre la cancelación de la agenda e insistió en que el Congreso se mantenga activo con el uso, si es preciso, de herramientas digitales. Tanto los populares como Ciudadanos solicitaron la comparecencia del presidente del Gobierno, y, pese a no obtener suficiente respaldo, volverán a hacerlo. En la formación conservadora consideran que Pedro Sánchez podría dar explicaciones sobre la evolución de la epidemia incluso por videoconferencia en la sesión del 24 de marzo. Tampoco prosperó su solicitud de crear una comisión parlamentaria de seguimiento del coronavirus.
En el Senado, mientras tanto, mantienen el pleno del martes, una versión exprés para ratificar el acuerdo sobre la adhesión de Macedonia del Norte a la OTAN.
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