Secciones
Servicios
Destacamos
Cristian Reino
Barcelona
Martes, 3 de octubre 2023, 14:36
El independentismo cruzó ayer mensajes confrontados en relación a las negociaciones para la investidura de Pedro Sánchez. Mientras el Govern apremió al candidato socialista a «ponerse las pilas» si no quiere «acabar como Feijóo», el secesionismo más radical celebró el sexto aniversario de la huelga ... del 3 de octubre de 2017, cargando contra ERC y Junts, a los que acusó de «sumisión» ante los socialistas y de estar «rogando clemencia al invasor» con una amnistía.
El Gobierno catalán instó a Sánchez a mover fincha cuanto antes y a ser valiente. En el Ejecutivo catalán creen que la negociación va muy lenta. El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, fijó la semana pasada las bases de la negociación. Exigió una ley de amnistía y un compromiso del presidente del Gobierno de que trabajará para acordar, antes de 2027, las condiciones para celebrar un referéndum. Además, la portavoz de la Generalitat, Patrícia Plaja, calificó ayer como «imprescindible» y «urgente» para la investidura el traspaso de Cercanías de Renfe.
En paralelo, la plataforma 3 de octubre, que organizó la huelga general del 3-O de 2017 como protesta contra las cargas policiales del 1-O, se unió ayer a las críticas que la ANC lanzó el domingo pasado, en el aniversario del referéndum ilegal, contra ERC y Junts por estar negociando la investidura de Sánchez. «No queremos ni pactos ni mandangas históricas», afirmó la ANC. Los responsables de la plataforma 3-O acusaron a ERC y Junts de haber optado por la vía de la «sumisión», «rogando al invasor que tenga magnanimidad y clemencia con una amnistía».
Sánchez presionó ayer a Carles Puigdemont, al que reclamó generosidad. El secesionismo radical le pidió todo lo contrario. Que aguante y no renuncie a exigir un referéndum. El expresidente de la Generalitat se juega su futuro y el de su partido. Si cede, emergerá una cuarta candidatura nacionalista. Clara Ponsatí dio ayer casi por hecho que la lista electoral que impulsa la ANC saldrá adelante. La eurodiputada de Junts se mostró muy crítica con Puigdemont por negociar una amnistía. «A mí no me volverán a enredar», aseguró en 'vilaweb'.
El independentismo radical aprieta a Puigdemont y el constitucionalismo hace lo propio con Sánchez. Seis años después, volverá a salir a la calle en Barcelona, en una manifestación que llega en plenas negociaciones para la investidura. Sociedad Civil Catalana, plataforma antisoberanista, ha convocado una protesta para el próximo domingo bajo el lema «No en mi nombre: ni amnistía, ni autodeterminación». El exalcalde socialista de A Coruña, Paco Vázquez, y la jurista Teresa Freixes, leerán los discursos. Vázquez, que ya hace tiempo que no pertenece al PSOE, se une a las voces críticas de la vieja guardia socialista que han salido a cargar contra la amnistía.
Hace seis años, cerca de un millón de personas se manifestaron contra el 'procés'. Fue una concentración contra el secesionismo. La de este domingo vuelve a serlo, pero con una diferencia. Los socialistas no participarán y serán blanco de las críticas pues son quienes negocian una amnistía. La protesta de este domingo reunirá a la plana mayor del PP, con Alberto Núñez Feijóo e Isabel Díaz Ayuso, a la cabeza. También acudirán dirigentes de Ciudadanos y de Vox (Santiago Abascal). Desde SCC, en cualquier caso, reclaman que ningún partido intente capitalizar la protesta y piden que no lleven logos ni enseñas. Los dirigentes políticos no marcharán en la cabecera.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.