El Gobierno ve encauzada la negociación para evitar que ERC tumbe los Presupuestos

Montero evitó ofrecer detalles. Sin embargo, aseguró, en una entrevista en TVE, que las conversaciones con los grupos parlamentarios «van bien». «Saben que en un escenario tan poliédrico como el del Congreso de los Diputados muchas veces las negociaciones se prolongan más allá de lo que a todos nos gustarían -dijo con cierta cautela- pero espero que todo el mundo comprenda que es necesario para nuestro país y nuestros ciudadanos que tengamos unas nuevas cuentas públicas que promueven el bienestar, que nos protegen frente a las consecuencias de la guerra y sobre todo nos permiten que todo el mundo encare este próximo año en mejores condiciones».

Este martes el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, celebró un encuentro con representantes de ERC que, según adelantó 'La Vanguardia', sirvió para encauzar la tramitación parlamentaria del proyecto. Los republicanos vienen presionando con el cumplimiento del acuerdo firmado en la última reunión de la mesa de diálogo entre Gobierno y Generalitat, el pasado julio, para la «desjudicialización» del conflicto catalán y reclaman que se reabra el debate sobre la reforma del delito de sedición en el Código Penal. El Ejecutivo, por su parte, asegura que no se cierra a entrar en esa cuestión pero la desliga de la negociación presupuestaria.

El otro gran reproche de Esquerra, que a su vez necesitará de los socialistas catalanes si pretende sacar adelante las cuentas de la Generalitat tras la ruptura de la coalición de gobierno con Junts, es el relativo al cumplimiento de las inversiones comprometidas por el Estado en anteriores Presupuestos. Según el último informe de ejecución, en 2022 solo se materializó el 15%. El Gobierno admite que la cifras están por debajo de lo deseable pero esgrime que hay que tener en cuenta la situación de la que se partía y el impacto que han tenido tanto la pandemia como las consecuencias de la guerra de Ucrania.