Esquerra cede y anuncia un «cambio profundo» en los Mossos

Esquerra abrió la segunda ronda de contactos y se reunió con la CUP. Los anticapitalistas por su parte, hicieron lo propio con los comunes. De momento pocos avaces. En ambos encuentros, eso sí, las tres formaciones de izquierdas coincidieron en la necesidad de acometer cambios en el modelo de los Mossos, en plena ola de protestas y con los sindicatos policiales amenazando con el plante. El Govern condenó la violencia, pero al mismo tiempo acusó a la Policía catalana de actuaciones «no reglamentarias».

El relato crítico de la CUP con los Mossos se ha impuesto en las conversaciones entre las fuerzas soberanistas. Esquerra trata de convencer a los anticapitalistas para que entren al futuro gobierno o al menos permitan la investidura. El debate en el seno de la izquierda radical contempla incluso la reclamación de la presidencia de la Cámara catalana. ERC y la CUP se conjuraron para acometer un «plan de choque» para la próxima legislatura que debe permitir hacer un «cambio profundo en el modelo de seguridad y orden público de Cataluña». Los comunes y los anticapitalistas compartieron la necesidad de acabar con los proyectiles de foam.