La ANC desafía a Aragonès y plantea una Diada contra el Govern

Si el año pasado ya se escucharon abucheos e insultos contra los dirigentes secesionistas, por ejemplo contra Oriol Junqueras, que había sido indultado unos meses antes, este año el foco de las críticas estará puesto en el Govern de la Generalitat.

La ANC intensifica estos días su campaña de movilización y ya apunta que la protesta de este año está focalizada en arremeter contra el Gobierno catalán por no haber dado pasos hacia la independencia. Algunas fuentes independentistas hablan incluso de que se está preparando un linchamiento contra el Ejecutivo de Pere Aragonès, que el año pasado fue presionado: «President, haga la independencia», espetó Elisenda Paluzie. «Ahora más que nunca es imprescindible tu presencia en la manifestación de la Diada. Solo así presionaremos al Govern para proclamar la independencia», según la convocatoria de la ANC para la protesta de dentro de dos semanas.

El año pasado, acudieron a la manifestación 108.000 personas, según los cálculos de la Guardia Urbana, muy lejos de las grandes marchas de hace unos pocos años. Para la presente edición, los organizadores esperan guarismos similares a los de 2021, registrados en un contexto aún de pandemia.

El ambiente, eso sí, cada vez es más crispado y ya nadie escapa a las críticas. La división está en todos los ámbitos del movimiento: entre ERC y Junts, dentro de Junts, hay enfrentamiento entre el independentismo de base y el institucional y hay una corriente antipolítica creciente, que es la que revienta los actos.