El PP decide multiplicar su presencia en los próximos plenos

Si algo había caracterizado las últimas sesiones era la imagen de un hemiciclo en versión reducida. La propuesta de la presidenta, Meritxell Batet, fue un 5% de representación en la primera convocatoria y un 10% en la segunda, dado que la extensión del pleno obligaba a la intervención de más diputados.

El PP, que asegura que aquel fue un «pacto de caballeros», quiere, sin embargo, ahora aumentar todo lo posible su asistencia con la consideración de que la medida sanitaria de mantener un metro de distancia queda asegurada si se intercala un escaño vacío entre diputados.

Fuentes parlamentarias recuerdan, en todo caso, que limitar el número de presentes también permite reducir el personal de la Cámara. En este sentido, Unidas Podemos pidió a los populares reconsiderar su decisión y Pablo Echenique advirtió de que se ponen «en peligro» ellos y exponen a los trabajadores del Congreso. La vicesecretaria general del PSOE, Adriana Lastra, fue más allá y acusó al PP de hacer seguidismo del partido de Santiago Abascal, que ha resuelto volver a los despachos: «Vox toca el silbato y la derechita cobarde baila».