Belarra advierte al PSOE que el acuerdo para los Presupuestos «está lejos»

Así lo dejó claro este miércoles la ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, que calificó como «imprescindibles» estas dos cuestiones. Los morados consideran que hasta ahora el Ejecutivo ha estado «sobreviviendo» frente a la pandemia, pero en este momento «toca impulsar la agenda social». En Ferraz son más cautelosos y no quieren incidir en la reforma fiscal hasta que la recuperación económica se consolide; además, aún esperan conocer las conclusiones de la mesa de expertos en reforma tributaria. Tampoco están dispuestos a emprender una regulación del alquiler que no incluya contrapartidas para los arrendadores o pueda generar situaciones de inseguridad jurídica. El acercamiento está atascado por estas cuestiones.

Por el momento, Belarra descarta que la negociación vaya a desbloquearse en las próximas semanas, como aseguró el martes pasado la vicepresidenta primera, Nadia Calviño. El primer encuentro entre los dos equipos negociadores, encabezados por la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, por parte socialista, y el secretario de Estado de Derechos Sociales, Nacho Álvarez, por los morados, tuvo lugar en julio. Entonces ya se preveían discrepancias, pero los socios esperaban tener listo el proyecto antes del plazo que fija la Constitución (el 30 de septiembre).

La propia Calviño anunció que esperaba llevar el borrador al Consejo de Ministros el próximo 28 de septiembre, una fecha que ha causado «sorpresa» en Unidas Podemos, como reconocen fuentes de la formación. Pero el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, volvió a ratificar este miércoles, antes de intervenir en la Asamblea General de la ONU en Nueva York, que la intención del Ejecutivo es presentar las cuentas «en tiempo y forma», también eludió las preguntas relativas a las exigencias de los morados.

Belarra y los suyos defienden la fijación de un tipo mínimo del 15% en el impuesto de sociedades e incrementar dos puntos los tipos impositivos sobre la base general para los contribuyentes que tengan rentas superiores a 130.000 euros y cuatro puntos para la parte que exceda los 300.000 euros. Para justificarlo puso como ejemplo los planes del presidente estadounidense Joe Biden. «Tenemos una situación inconstitucional en el Impuesto de Sociedades. Hay empresas que han estado pagando cero euros mientras la gente normal paga de media un 15%. Eso no cumple con la Constitución, que dice que los impuestos deben ser progresivos y justos», señaló en una entrevista en TVE.

Las palabras de la líder morada fueron respondidas horas después por la propia Calviño, que pidió a Podemos que no vincule el apoyo a los Presupuestos con la futura Ley de Vivienda, porque las cuentas públicas, añadió, «son fundamentales para impulsar la recuperación y desplegar los fondos europeos».

En cuanto a la subida de impuestos, la vicepresidenta cree que la prioridad del Gobierno es impulsar la recuperación económica y que ésta debe ser «sólida» antes de acometer cambios en el sistema fiscal que pudieran perjudicarla. «Vamos a ver cómo terminan las negociaciones. Nuestra prioridad es impulsar el crecimiento y la creación de empleo y los motores son el consumo y la inversión, y hay que seguir impulsándolos», apostilló.