Ayuso retoma el pulso con Génova por el control del partido en Madrid

La intención de la presidenta regional es no posponer el asunto más allá de marzo y para ello se aferra a los estatutos del partido. Le preocupa que el congreso del PP de Madrid se dilate demasiado y no haya tiempo para preparar las listas ni enfrentar con tranquilidad el próximo envite electoral. Aunque en su entorno reconocen que la decisión que adopte Génova «se respetará».

Ayuso ha salido fortalecida de la cita electoral en Castilla y León después de que Alfonso Fernández Mañueco tuviese que recurrir a ella como revulsivo para apuntalar su campaña. Una irrupción que no estaba en el diseño de la cúpula del PP, que había limitado su presencia a un acto y al final se convirtieron en cuatro. Cada uno de los mítines en los que la líder madrileña participó han demostrado además su indiscutible tirón.

Todo ello reafirma al entorno de Ayuso a la hora de situarla como gran activo del PP a nivel nacional para certificar que los incontestables resultados del pasado 4-M se debieron exclusivamente a ella y no a las siglas que defiende. Una planteamiento que, sin embargo, no comparte la cúpula popular.

El secretario general, Teodoro García Egea, defendió este lunes que son la marca y la papeleta del partido las que ganan las elecciones, aunque esa lista esté encabezada por Isabel Díaz Ayuso, Alberto Núñez Feijóo o Alfonso Fernández Mañueco. «El PP es el que gana, Pablo Casado es el que gana», zanjó antes de pedir dejar de hablar de «cuestiones internas que no interesan a nadie».

En Génova no asumen el resultado del 13-F como una razón para ceder en su posición respecto al congreso de Madrid e insisten en que no alterarán el calendario de la renovación territorial. «Se celebrarán en tiempo y en forma», aseguró el vicesecretario de Comunicación, Pablo Montesinos.

El PP aún tiene pendiente poner fecha a alrededor de una decena de cónclaves, empezando por las comunidades pluriprovinciales y después las uniprovinciales. Así, se prevé que el primero sea el de Extremadura, al que seguirán los congresos de Asturias, Santander o Madrid.