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Isabel Díaz Ayuso, este jueves en Barcelona. EFE

Ayuso planta cara en Barcelona a la armonización fiscal

La presidenta de la Comunidad de Madrid viaja a Cataluña para hacer campaña a favor del PP a dos meses y medio de las elecciones y en apoyo de los empresarios

Cristian Reino

Barcelona

Jueves, 26 de noviembre 2020, 18:36

Tras avisar al Gobierno y a Esquerra que será la «peor pesadilla» de quienes intenten acabar con el modelo fiscal madrileño, la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso, desembarcó este jueves en Barcelona, en una visita de dos días, en la que defendió el sistema tributario ... de la Comunidad de Madrid y cargó contra quienes defienden la armonización tributaria de las autonomías. «No somos un paraíso fiscal», dijo a su llegada a Barcelona.

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A juicio de la presidenta autonómica es «pernicioso» e «injusto» tratar de enfrentar a los territorios y presentar a Madrid como una región que se queda con el esfuerzo de los españoles. «La gran mentira del día es que los españoles pagan las rebajas fiscales de los madrileños», dijo en un tuit, en un cruce de acusaciones con Pere Aragonès. Ayuso cargó contra la armonización fiscal y abogó por la bajada de impuestos. «Los nacionalistas y socialistas llegan al infierno fiscal», remató.

Ayuso se ha convertido en el principal ariete del Gobierno y de los independentistas. La dirigente del PP ha hecho de las ventajas fiscales que ofrece la Comunidad de Madrid a las empresas, que Esquerra calificó de «dúmping fiscal discriminatorio» y que reclama suprimir, uno de sus caballos de batalla. Piensa defender este sistema con uñas y dientes. La dirigente regional viajó a Cataluña para hacer campaña a favor del PP a dos meses y medio de las elecciones y en apoyo de los empresarios, las familias y para defender el español y la libertad de elección educativa, días después de la aprobación de la llamada ley Celaá.

La agenda catalana de Ayuso no incluyó ningún acto con presencia de medios de comunicación. Se reunió con la entidad constitucionalista S'ha acabat, que trabaja en el ámbito universitario, así como con la presidenta de la Asamblea por una Escuela Bilingüe, diferentes asociaciones de la escuela concertada y con el sector de los hosteleros. «Lo fácil hubiera sido cerrar Madrid, pero esta no era la solución», les trasladó.

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