Los dardos lanzados por Pedro Sánchez este domingo contra Isabel Díaz Ayuso no han sentado nada bien a la presidenta regional que ha acusado al jefe del Ejecutivo de atacar a la Comunidad de Madrid «como arma electoral», de marginarla frente a Cataluña en inversión ... y de convertir al PSOE en «un refugio de golpistas, bastasunos, okupas y bolivarianos» debido a los socios de coalición y de apoyo de legislatura. «El 4 de mayo -le ha retado- nos vemos en las urnas».
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Dolida con las declaraciones de Sánchez que arremetió contra ella por «cruzarse de brazos ante la pandemia» y generar «un récord en descontrol y desmadre», Díaz Ayuso no se ha mordido este lunes la lengua y en un desayuno informativo ha constatado que Podemos y sus círculos han «extremado» al PSOE en los últimos años «hasta dejarlo irreconocible» para los propios socialistas históricos. «Hoy, el PSOE comparte gobierno con Podemos, una formación comunista, antisistema, abiertamente guerracivilista y cuyo objetivo declarado es acabar con el modelo de 1978», ha remarcado.
La candidata del PP a las elecciones del 4-M considera que el jefe del Ejecutivo «tiene una obsesión personal con Madrid y contra mí», y afirma que «el único desmadre lo tiene Sánchez en las encuestas» y le ha acusado de «intentar impedir esta elecciones con todo tipo de argucias». «Menos mal que no dijo libertinaje», ha apostillado Díaz Ayuso antes de señalar al presidente como el principal responsable de que no haya controles «exhaustivos» en Barajas y por haber dado por «finiquitada» la pandemia en junio del año pasado.
La dirigente madrileña también ha tenido palabras para el exvicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, de quien ha dicho que «su campaña es un sainete» e incluso duda de que pueda obtener escaño en la Asamblea de Madrid. «Creo que por eso está tan nervioso. Está haciendo una campaña que es un sainete, buscando enemigos en todos los demás», ha manifestado.
Sobre la futura composición de su Ejecutivo, si el próximo 4 de mayo gana las elecciones y los números le dan, Díaz Ayuso no ha querido desvelar sus planes aunque si ha adelantado que hará «un gobierno más reducido» y se ha mostrado dispuesta a recuperar a la dirigente de Ciudadanos, Marta Rivera de la Cruz, que ha sido hasta ahora su consejera de Cultura. «Siempre -ha dicho de ella- fue colaboradora con el resto del Gobierno, independientemente de las siglas».
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La dirigente popular ha negado que tuviera diferencias con la dirección nacional del partido por el fichaje de Toni Cantó, que estaba entre sus planes, y ha achacado a un «desfase de días en cuanto a la presentación» de candidatos».
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