El coche de Lucas Vidal: «Prefiero disfrutar al volante, como copiloto soy de los pesados»

Y es que la música y el automovilismo son dos mundos que cada vez están más ligados. A sus 36 años, este madrileño reconoce que los coches son una herramienta para moverse más que una pasión, pero «si son cómodos, mejor que mejor», relata a este periódico Vidal, quien añade que «siempre me ha gustado mucho conducir y se me da muy bien la verdad». Aunque ha confesado que, cuando se presentó al examen para sacarse el permiso a los 18 años, tuvo que hacerlo tres veces, pero «el práctico lo aprobé a la primera», apunta, detallando que su madre le «enseñó a conducir un poquito antes».

Echando la vista atrás, recuerda su primer coche, un Opel Corsa con el que realizó su primer viaje largo a Cádiz, que, bajo risas, asegura que guarda «demasiados» secretos inconfesables que prefiere que «mueran» con aquella primera montura. Pero está dispuesto a desvelarlo todo sobre el modelo que conduce actualmente, un Peugeot 3008 GT Hybrid4, un híbrido enchufable -que comparte garaje con una motocicleta también Peugeot, la Metropolis- que ofrece una autonomía «full electric» de 59 kilómetros (ciclo WLTP) y con el que el rendimiento dinámico y el placer de conducción están asegurados gracias a sus 300 CV, así como mantiene sus puntos fuertes como la habitabilidad, con un maletero de 395 litros.

«Es un coche que me encanta, la verdad. Es tremendamente silencioso y espacioso: puedes llevar todo lo que necesitas para ir a trabajar y, luego, el fin de semana ir con tu familia al campo sin necesidad de sacar todo», detalla el compositor, a la vez que asegura que este Peugeot «responde totalmente a lo que esperaba antes de adquirirlo».

Es más, cree fielmente que un coche dice mucho de su dueño. Por ejemplo, como en la música, para Vidal prima «más las emisiones, luego la mecánica y, por último, la estética. Aunque creo que nunca iría en un coche realmente feo (se ríe)». Aunque puntualiza que tiene que ir al volante, donde disfruta «un montón», ya que como copiloto «soy de los pesados... no lo puedo remediar. Tendré que trabajar más este aspecto», manifiesta.