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juan carlos barrena
Berlín
Lunes, 27 de septiembre 2021, 17:47
Por escaso margen, pero es una victoria. El Partido Socialdemócrata Alemán (SPD) y su candidato Olaf Scholz se impusieron finalmente por una estrecha, pero clara diferencia, este domingo a cristianodemócratas y socialcristianos de Baviera (CDU/CSU) en las elecciones legislativas, según el resultado oficial, final ... y provisional que hizo pública la autoridad electoral germana en la madrugada de hoy. El SPD ganó más de cinco puntos frente a los comicios de 2017 hasta alcanzar un 25,7% de votos, mientras los conservadores perdieron más de ocho con un 24,1%. Tras 16 años de gobierno de Angela Merkel y de la mano de Armin Laschet, CDU/CSU se precipitaron al abismo y registraron el peor resultado de los conservadores en la historia de la República Federal. Los Verdes ganaron casi 6 puntos hasta un 14,8% y obtuvieron su mejor resultado en unos comicios al Bundestag, aunque quedaron lejos de sus aspiraciones, ya que muchos sondeos hace pocas semanas les atribuían más del 20% de votos.
Igualmente han mejorado ligeramente los liberales (FDP), que suben hasta un 11,5%, mientras los ultraderechistas de Alternativa para Alemania (AfD) han perdido más de dos puntos y bajan al 10,3%. De tercera fuerza política y principal partido de la oposición en el parlamento federal han pasado convertirse en quinta fuerza, superados por ecologistas y liberales. Aunque han quedado por debajo de la barrera del 5% mínimo de votos para alcanzar representación parlamentaria con un 4,9%, el partido de La Izquierda se mantendrá en el Bundestag. La obtención de tres mandatos directos, es decir, el triunfo en el voto personal de tres de sus candidatos, permitirá a los socialistas contar con 39 escaños en el hemiciclo. Además, la minoría danesa contará de nuevo con un escaño en el Parlamento. La Asociación Electoral del Sur de Schleswig, región que limita con Dinamarca, participaba por primera vez en 60 años en las elecciones legislativas alemanas y pudo colocar un parlamentario en la cámara al quedar exenta de la cláusula del 5%.
Cuando las encuestas a pie de urna anunciaban un empate técnico y antes de conocerse los primeros datos del escrutinio, tanto Scholz como Laschet afirmaron contar con un mandato para gobernar y su decisión de negociar la formación de un ejecutivo de coalición. Socialdemócratas y conservadores expresaron su intención de sondear para ello a verdes y liberales, únicos partidos con los que pueden aspirar a formar un tripartito con mayoría parlamentaria, toda vez que los populistas de AfD, convertidos en parias de la política alemana, quedan excluidos de toda negociación. Existe también la opción de una gran coalición como la que ha gobernado Alemania en tres de las cuatro legislaturas de Merkel, pero sería la última y menos deseable para SPD y CDU/CSU. Ecologistas y liberales han expresado ya su intención de iniciar contactos independientemente de los grandes partidos para ver si es posible sumarse unidos a un futuro gobierno. Sus diferencias programáticas son apreciables, pero ambas formaciones han expresado su compromiso con la razón de estado.
Entre tanto, la prensa alemana subraya este lunes las dificultades a las que se enfrentan Scholz y Laschet para negociar un ejecutivo y ha reaccionado con división ante las aspiraciones de los conservadores de formar gobierno pese a haber perdido los comicios. Sorprende por ácido el titular del diario conservador Die Welt, que critica la posible creación de un gobierno encabezado por CDU/CSU y de la mano de Laschet. «Fusión nuclear u oposición – La Unión de Laschet practica la obediencia al cadáver», titula el rotativo de Berlín y asegura que «se impone el clima contra Laschet. La Unión ha sido reducida a su substancia. Pese a todo el candidato a la cancillería cree observar un 'claro mandato' de los electores y se muestra dispuesto a hacer concesiones para alcanzar una 'Jamaika Koalition´», una alianza que lleva los tonos de la bandera del país caribeño coincidente con los colores de los partidos, negro para los conservadores, el verde de los ecologistas y el amarillo de los liberales.
En su edición digital, el semanario «Die Zeit» ahonda en las críticas internas al candidato conservador y titula «La Unión de Valores exige la dimisión de Armin Laschet y Markus Söder», presidente de la CSU y primer ministro de Baviera. El influyente grupo conservador emitió un comunicado en el que exige que «los presidentes de CDU y CSU asuman las consecuencias del desastre electoral en las elecciones al Bundestag y que dimitan de manera inmediata». El «Frankfurter Allgemeine» se pregunta «¿Qué coalición quieren los electores?» y subraya que solo dos partidos, verdes y liberales, tienen segura su participación en el nuevo ejecutivo. Destaca que aunque las encuestas dan preferencia con una mínima ventaja a una alianza liderada por los conservadores, es el candidato socialdemócrata, Olaf Scholz, el que una mayoría del 48%, desea al frente del nuevo ejecutivo. Por Laschet se decanta justo la mitad, un 24%.
Pero el titular más divertido sin duda es el del diario de izquierdas TAZ, que bajo el titular «Es niño» publica la foto de un pijama de bebé azul, dejando claro que la Cancillería Federal será ocupada en el futuro por un hombre. Titular e imagen son un calco de los publicados tras los comicios de 2005, cuando Angela Merkel llegó por primera vez al poder. Entonces titularon «Es niña» y ofrecían la foto de un pijamita de bebé rosa.
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