beatriz juez
Corresponsal. París
Miércoles, 3 de noviembre 2021, 18:57
Casi 60 años después del final de la Guerra de Argelia (1954-1962), Francia indemnizará mejor a los harkis, los antiguos combatientes argelinos que lucharon junto al Ejército francés contra la independencia de Argelia. El Consejo de Ministros aprobó este miércoles un proyecto de ley ... para «el reconocimiento de la Nación y la compensación de los daños sufridos por los harkis y otras personas repatriadas de Argelia» tras esa contienda.
Publicidad
«Este proyecto de ley reconoce los servicios prestados a aquellos que sirvieron a Francia y que ésta abandonó», explicó en rueda de prensa el portavoz del Gobierno, Gabriel Attal. También reconoce la responsabilidad del Estado galo en «la acogida indigna» de los harkis y sus familiares repatriados a Francia tras la guerra y prevé «una reparación consecuente» a los daños sufridos, añadió el portavoz.
Las asociaciones de harkis y sus descendientes reclamaban desde hace años mejores indemnizaciones de las ya existentes por parte del Gobierno francés. El montante de la indemnización deberá aún ser determinado en función de un baremo fijado por un decreto y de los daños sufridos. También se prevé la creación de una comisión encargada de recoger y transmitir la memoria de los harkis.
El presidente Emmanuel Macron pidió en septiembre perdón, en nombre de la República francesa, a los harkis. En la época colonial, eran unos 200.000, hoy quedan vivos unos 3.000, según algunos cálculos. Pero sus descendientes forman una comunidad de 400.000 miembros.
Tras la independencia de Argelia en 1962, París abandonó a su suerte a miles de harkis. Considerados traidores por muchos argelinos, fueron víctimas de sangrientas represalias en Argelia. El expresidente argelino Abdelaziz Bouteflika llegó a comparar a los harkis con los colaboradores de los nazis.
Publicidad
Los harkis que lograron abandonar Argelia y llegar a Francia no fueron recibidos con los brazos abiertos, ni agradecidos por sus servicios. Fueron recluidos en campos de internamiento, como los de Rivesaltes y Bias, en condiciones indignas. La experiencia fue traumática para muchos de ellos y de sus familiares.
En Francia, el país al que los harkis habían servido y por el que había luchado, «no encontraron asilo, sino un yugo, ni hospitalidad, sino hostilidad», explicó en septiembre Macron, quien reconoció que Francia «les dio la espalda».
Publicidad
Durante su presidencia, Macron ha dado varios pasos para promover la reconciliación y tender puentes entre Francia y Argelia intentando no herir las sensibilidades de las distintas comunidades que sufrieron la contienda y sus dramáticas consecuencias.
El presidente ordenó, por ejemplo, desclasificar los archivos sobre la Guerra de Argelia. Encargó al historiador Benjamin Stora un informe sobre la colonización y la guerra de independencia de la excolonia. Stora hizo varias recomendaciones, algunas de las cuales el presidente ha seguido y otras no.
Publicidad
El pasado marzo, Macron reconoció «en nombre de Francia», que el Ejército de su país «torturó y asesinó» en 1957 al abogado y dirigente político nacionalista argelino Ali Boumendjel durante la guerra de independencia de Argelia e hicieron parecer que su muerte había sido un suicidio.
Tras haber pedido perdón a los harkis en septiembre, Macron se convirtió, un mes después, en el primer presidente francés en participar en una ceremonia de homenaje a las víctimas de la masacre de París del 17 de octubre de 1961, la represión sangrienta por parte de la policía parisina de una manifestación de argelinos en plena Guerra de Argelia.
Publicidad
El Palacio del Elíseo reconoció que la represión de la manifestación fue «brutal, violenta y sangrienta». Al menos 120 argelinos murieron en manos de la policía francesa. Hubo unos 12.000 detenidos y numerosos heridos. Durante décadas se ocultó en Francia la magnitud de la tragedia.
Macron reconoció que «los crímenes cometidos esa noche bajo la autoridad de Maurice Papon (entonces responsable de la policía de París) fueron inexcusables para la República».
El próximo mes de marzo, Macron dará otro paso para tratar de cerrar las heridas, aún abiertas, entre París y Argel. El presidente francés conmemorará el 60 aniversario de los Acuerdos de Évian, que pusieron fin en 1962 a la guerra de Argelia. A un mes de las elecciones presidenciales en Francia. Macron deberá hacer grandes equilibrios para no herir sensibilidades en los dos países.
Disfruta de acceso ilimitado y ventajas exclusivas
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.